Prostituta siendo penetrada por 3 al mismo tiempo en un sexo muy salvaje. Me llamo Isadora, tengo 22 años y gano dinero haciendo sexo con hombres ricos y pervertidos. La mayoría de las veces son viejos cabrones que no aguantan ni 30 minutos follando. Pero ese día pillé a hombres de 30 años que no se andaban con chiquitas y seguían en la más perfecta forma. Uno de ellos se iba a casar y sus amigos querían pagar para que tuviera sexo con este hombre en una despedida de soltero privada.
Me preguntaron si quería tener relaciones sexuales con el novio y otros dos amigos, pero les dije que no aceptaría. Sólo llevaba 6 meses viviendo como prostituta y aún no quería tener relaciones sexuales con más de dos personas. Dije que lo haría con dos, pero que no podría hacerlo con más. Entonces el hombre que me contrató dijo que sólo me querría para una persona, en este caso su prometido. Depositó el dinero y ese mismo día por la noche estaría en el hotel que él pidió esperando para dar placer al travieso prometido. Llegó la hora y cuando entré en la habitación sólo había un hombre tumbado en la cama.
Así que entré y pregunté si era el novio y el granuja dijo que sí. Me senté en la cama y empecé a besar la boca del bribón y él empezó a sacar su pene. Empecé a chuparlo muy sabroso dejándolo muy excitado. Luego me fui quitando la ropa muy lentamente y mostrando mis grandes tetas sabrosas y mi hermoso culo perfecto para él. El cabrón estaba muy excitado, así que me puse a cuatro patas sobre la cama. La morena empezó a chuparme el coño y, de repente, la puerta del baño se abrió y salieron dos hombres más.
Al mismo tiempo vi que era una trampa y me levanté de la cama y empecé a ponerme el vestido. Pero entonces el travieso prometido me pilló de nuevo y me tiró a la cama. Cuando empecé a gritar, los tres se juntaron y uno de ellos me sujetaba mientras el otro me ataba un paño en la boca para que no pudiera gritar. Me quitaron el vestido con cuidado para no rasgarlo y empezaron a sacar sus penes. Entonces uno de ellos penetró en mi ano y el otro comenzó a penetrar en mi coño. El tercer hombre me sacó el paño de la boca y se metió el pene, tirándome del pelo con fuerza y diciéndome que me callara.
En ese momento acabé marchándome porque eran más fuertes que yo. Sabía que si intentaba escapar serían más agresivos, así que traté de hacerlos llegar al orgasmo más rápido. Empecé a chupar con más fuerza la polla de uno de los cabrones y gemía y me revolvía mientras los otros me penetraban el coño y el ano. Entonces el novio se tumbó y yo empecé a rodar sobre su polla, los otros dos me metieron sus pollas en la boca. Mi culo ya se estaba poniendo rojo y me dolía mucho porque sus pollas eran muy grandes.
Después me puse a cuatro patas y el otro hombre me penetraba por el culo mientras el segundo me penetraba por el coño. Y el novio puso su enorme pene dentro de mi boca. Esta doble penetración me estaba dejando con el coño y el culo ardiendo. Tras unos minutos de penetración y yo chupando al novio se corrieron casi al mismo tiempo. Cuando se acostaron, fui rápido, cogí mi ropa y mi bolso y salí corriendo de la habitación. Cogí el ascensor, me puse la ropa y me fui, después de ese día empecé a tener más cuidado e incluso contraté a un guardia de seguridad.
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