Soy guía turístico y le penetré el culo a una japonesa

Soy guía turístico y penetré el culo de una japonesa casada. Mi nombre es Rafael, trabajo como guía turístico aquí en Cancún y termino conociendo gente de todo el mundo. Somos conocidos por nuestras hermosas playas, por la famosa fiesta Spring Break donde la ciudad se convierte en una fiesta total. Y así viene gente de todas partes, además tenemos hermosos lugares para visitar. Pero yo soy más de llevar a los jóvenes a descubrir la diversión de la ciudad y pasarlo en grande. Entonces termino disfrutando y teniendo sexo con muchas gringas de todo el mundo. Como soy un mexicano genuino, termino siendo el primero con el que tienen contacto y por eso es más fácil.

Y quiero contarles sobre un grupo de japoneses que vinieron aquí para ver la ciudad y aún así disfrutar de la famosa fiesta Spring Break. Y dentro de ese grupo había una japonesa de unos 30 años llamada Mioko, delgadita perfecta dueña de unos pechos grandes y bonitos que me ponían muy cachondo. El problema es que Mioko estaba con su novio, un japonés lleno de dinero que estuvo patrocinando todo el viaje. Incluso me pagó bien para mostrarles los mejores clubes, las mejores fiestas para que disfruten.

Pero él era muy molesto y ya en el segundo día de la fiesta, Mioko y yo estábamos muy unidos. Así que decidí que encontraría una manera de hacernos sentir más cómodos. Así que estaba sirviendo tequila y más tequila para que bebiera su novio. Quería emborracharlo tanto que tuviera que ir al hotel a dormir. Y eso fue lo que pasó, después de muchísimos chupitos de tequila este tipo no pudo más y vomitó en una fiesta. Tuvimos que llevarlo directo al hotel y allí se duchó y estuvo listo para dormir toda la noche.

Llevé al resto del personal al restaurante y Mioko dijo que cuidaría de su novio. Tan pronto como se desmayó, volví al hotel y llevé a Mioko a mi casa donde íbamos a tener muy buen sexo. Mientras el resto del grupo se divertía en el restaurante y el novio celoso dormía, esta chica japonesa y yo íbamos a tener mucho sexo delicioso. Y le mostraría las maravillas de México. Apenas llegamos a casa compré más tequila, puse la música y Mioko me tiró en el sofá y empezó a quitarse el vestido muy despacio, haciéndome desnudar muy rico.

Estaba locamente cachondo al ver a esta mujer japonesa traviesa con enormes pechos frente a mí. Me quitó la ropa interior, se arrodilló y dijo que se moría por tener sexo conmigo. Y me estaba chupando muy sabroso volviéndome loco cachondo. Me miraba con sus ojitos y me chupaba el pene intensamente y eso me hacía muy feliz. Luego comenzó a frotar sus tetas calientes en mi pene, poniéndome cada vez más cachondo. Esta mujer japonesa era realmente traviesa y sabía cómo satisfacer a un hombre.

Ella vino sentada y mi polla gruesa y grande estaba lastimando su coño caliente. Se sentó de buena gana ya que estaba muy borracha. Yo sujetando ese culito caliente y ahogándome en los enormes pechos de la jovencita japonesa dejando su coño mojado. A esta traviesa la penetré a cuatro patas y hasta la llevé al baño. Donde ella se paró y yo estaba penetrando su coño y poniendo mi dedo en su culo caliente. Al final me vine en cara de travieso, luego tuve que llevarla al hotel donde pasaría el resto de la noche con su marido cornudo. Luego recogí al resto de la gente y los llevé también al hotel. Esta fue mi experiencia con esta maravillosa japonesa tetona, espero que os haya gustado.