Antes de ir a dormir mi hija siempre me chupa la polla. Eso es porque cada vez que necesita mucho dinero se lo doy, pero por supuesto, necesito tener esa recompensa. Mi hija vive solo conmigo. Mi esposa triste y tristemente falleció. Después de eso, ni siquiera quise cuidar de mi hija y la dejé con mis padres. Pasé años viajando porque amaba mucho a mi esposa. Y necesitaba dinero para ayudar a cuidar a mi hija.
Así que me fui a Nueva York y me quedé allí unos años. Cuando regresé, mi hija ya tenía 19 años y se parecía mucho a su madre. Volvimos a vivir en la misma casa después de que obtuve suficiente dinero para estar bien. Y un día, después de beber mucho, llegó a casa de una fiesta. Llevaba un conjunto muy corto y no me pude resistir. Como se parecía demasiado a su madre, terminé tomándola a la fuerza y penetrándole el coño. Pero a ella le gustó mucho y me dejó penetrar sabroso.
Después de ese día ella me emocionó mucho. Pero luego, para que ella tuviera sexo conmigo, tuve que darle mucho dinero. Así que siempre tengo que hacer esto porque soy adicto a follarme a mi hija. Y le doy casi mil dólares todos los meses para que disfrute de la vida con sus amigos y su novio. Pero para eso necesita hacerme feliz, y solo con buen sexo. Pero luego empezó a salir y dejó de joderme.
Ella también tenía miedo de que la dejara embarazada, por lo que decidió dejar de tener relaciones sexuales con su padre. Pero al menos un sexo oral que ella siempre me da. Todas las noches cuando voy a darle las buenas noches a mi hija, dejo un billete de $100 en su cama y ella me hace una mamada muy buena. Me excito muchísimo y siempre me corro en tu boca. Ella se lo traga todo y me voy a dormir muy feliz. Y tú, ¿te atreverías a jugar sucio con tu hija?
Y quiero contarles sobre una noche en que su novio estaba durmiendo en la cama. Fui a darle las buenas noches a mi hija y le pedí que me la mamara. Y la traviesa me la chupo hasta con su novio a su lado durmiendo profundamente. Entré a la habitación con el pene ya duro, le puse 100 dólares en la mano y me dijo que en este caso eran 200. Le di todo el dinero que quería y le saqué el pene. Y luego mi hija pequeña me estaba chupando caliente.
Estaba sumamente emocionada, a veces miraba a su novio para ver si se despertaba. Pero dormía mucho y no se movía. Mientras tanto su novia traviesa estaba chupando mi pene sin frescura y en poco tiempo me corrí en su boca. Se lo tragó todo y poco después me fui a dormir. Y también mi rutina con mi hija a la que le gusta mucho el dinero. Le gusta tanto que se burla de su propio padre.
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