Mi nombre es Pedro Arelano, tengo 38 años y me comí una travesti muy rica que tiene un culazo enorme y caliente. Recientemente me divorcié y como estaba sola y necesitada quería probar algo nuevo. Así que mirando la web de prostitutas de lujo, me fui a la sesión de travestis. Y allí vi a una mujer trans rubia muy caliente con pechos de silicona y un hermoso culo grande.
Estaba loco de lujuria y ya llamé a la traviesa. Ella me dio el precio y acepté pagar, era caro pero valió la pena. Y he estado esperando a esta perra toda la noche. Iba a correrse a las ocho y íbamos a follar bien caliente. Iba a ser mi primera relación sexual con un travesti y estaba muy nerviosa. Y cuando ella llegó el nerviosismo desapareció y mi pene se puso muy duro.
Como era una rubia maravillosa, realmente parecía una mujer. Mucho más guapa que mi ex mujer y mucho más guapa que mi propia hija. Estaba realmente muy emocionada con esta deliciosa muñeca. Y no tuvo vergüenza, ya me besó en la boca y me excitó aún más. Y para burlarse llevaba un vestido muy corto.
Siguió caminando por la casa tomando su bebida y dejando que su vestido se subiera. No quería follármela enseguida, como soy viejo quería hablar. Y conócela mejor para que el sexo sea aún más placentero. Y luego estaba el hecho de que sería la primera vez que me follaría a un travesti. Así que necesitaba tomármelo con calma para conocer mejor esta experiencia sin precedentes en mi vida.
Esta deliciosa travesti luego se quitó su vestido corto y me mostró un hermoso cuerpo. Ya vino sin braguitas y sin sujetador como le había pedido. Quería verla desnuda y admirar ese lindo cuerpecito. Ella era una rubia de grandes pechos de silicona, un bonito culo bien ajustado, piernas gruesas y cara de modelo.
De hecho, me excité mucho más cuando esta trans se quitó toda la ropa. Ella vino a mi encuentro y nos estábamos besando y vino pasando su mano por mi pene. Y yo chupando esas grandes y deliciosas tetas. Para matarme de placer hasta frotó esos enormes pechos en mi pene. Luego comenzó a chuparme la polla con gusto.
Me chupó el pene con deseo y yo me excitaba cada vez más. Me follé a un travesti y me encantó esta nueva experiencia. Despues de chuparme muy sabroso la traviesa quiso tomar un pene en su sabroso culo. Se frotó un poco de aceite en el culo y lo recostó. Y enterré mi polla en ese culo caliente emocionándome mucho.
Después de meter mucho mi pene en ese culo caliente, el travieso quería matarme de lujuria. Me acosté en el sofá y ella empezó a cabalgar mi polla con entusiasmo. Ella estaba dando una sentada muy fuerte y terminé disfrutando mucho en su culo caliente. Me emocioné mucho y vine de verdad. Dejé el culo del travesti todo sucio de esperma, y esa fue mi primera vez.
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