Le follé el ano a la morena flaca en el colegio

Lo que te voy a decir debe quedar entre nosotros, va a ser nuestro secreto. Solo para quienes siguen el portal de cuentos eróticos más grande de México. Y les cuento mi historia, que tuve con la morena flaca en mi escuela. Te volverás loco cuando te cuente detalles del sexo que tuve con esta niña traviesa en el baño de la escuela.

Esto pasó hace 5 años, pero lo recuerdo como si fuera ayer. La morena flaca se llamaba Ángel, tenía 18 años en ese momento, estábamos en el último año a punto de ingresar a la universidad. Y queríamos despedirnos del bachillerato haciendo algo bueno. Y terminamos teniendo muy buen e intenso sexo en el baño de hombres.

Y te vas a volver loco cuando te enteres de todo lo que pasó entre esta nueva traviesa y yo. Tan jovencita y ya teniendo sexo anal como una puta de lujo. Todavía recuerdo lo agradable y apretado que era su ano. Y muy calentita, me calentó todo el pene y terminé corriéndome así de traviesa. Y aún así la dejé con su culo caliente bien magullado.

Pero todo fue consentido porque ella realmente quería tener sexo anal conmigo. La llevé al baño porque era el único buen lugar para hacerlo. Nos encerramos en uno de los baños individuales y disfrutamos del sexo. Donde se sentó con todas sus fuerzas encima de mi pene y su culo ardía y estaba muy magullado, cojeaba de camino a casa.

Morena flaca haciendo anal en la escuela

Todo sucedió cuando estábamos a punto de terminar la escuela secundaria. Con solo unos días para irnos, decidimos despedirnos. Porque ella se iba a otra ciudad a hacer leyes y yo me iba a quedar aquí en mi ciudad. Así que tuvimos que despedirnos de una manera muy amena que quedara en la memoria. Y ella quería darme su culo en el baño de la escuela.

La llevé al baño de hombres, y ella estaba usando una falda corta y sin bragas. Bueno, ella pensó en ello para facilitar el sexo caliente hecho en el baño. Y llegando allí esta morena delgadita se levantó la falda y me mostró su culo ancho y caliente. Empecé a besarte el culo y chuparte el culo. Y ella gemía mucho mientras le lamían el culo.

Entonces este pequeño travieso escupir en sus manos y pasó a mi pene. Volvió a escupir y le pasó el culo dejándolo bien lubricado. Y se sentó muy despacio, donde mi pene entraba en ese culo prieto. Estaba realmente caliente y delicioso, y muy apretado. Estaba sentada lentamente y gimiendo de dolor y lujuria. Y yo estaba concentrada mirando su trasero.

Un culo muy bonito, redondo y grande. Me volví loco sosteniendo ese culo mientras mi pene le desgarraba el culo a la perra. Y ella se sentaba lentamente y luego aceleraba. Y yo desollándole el culo con todas mis fuerzas. En 15 minutos llegué y ella terminó viniendo también. Porque estaba acariciando el coño mientras me follaban el culo. Y ese anal fue realmente agradable y lo recuerdo hasta el día de hoy.