Dejé que mi mujer tuviera sexo con el dueño de un cártel, en realidad no dejé, me vi obligado a aceptar que esta locura sucediera y tuve que quedarme callado observando todo. Trabajo en un cartel, soy camarero en fiestas familiares y ayudo a limpiar la casa. No hago nada malo, y un día mi mujer fue a buscar dinero para comprar el almuerzo para ella y nuestro hijo.
Y mi jefe acabó viéndola entrar en la casa y se interesó mucho. Es un viejo muy malo y muy poderoso, y me llamó junto con mi esposa. Llegamos a su despacho y el muy bribón me decía que tenía una mujer preciosa y que con eso podía ganar mucho dinero. Le pregunté cómo y me dijo que me daría mucho dinero si aceptaba que tuviera sexo con mi mujer.
Me sentí ofendido y dije que no lo aceptaría inmediatamente. Luego me dijo que lo pensara bien porque no quería que me hiciera daño. Comprendí su mensaje y mi mujer también, y empezó a decir que aceptaba y que haría cualquier cosa con mi jefe. Me sonrió y me dijo que para que no me preocupara me dejaría ver cómo se acostaba con mi mujer.
Y me quedé allí en su habitación, sentado en su silla mientras le quitaba la ropa a mi mujer y me miraba. Estaba muy enfadado y tenía ganas de ir allí a pegarle, pero sabía que sería peor, pensé en mis hijos y en mi mujer y simplemente lo acepté y me quedé callado. Y el cabrón empezó a besar la boca de mi mujer y a chupar sus grandes pechos.
Mi mujer se acostó en la cama y él le pidió que se pusiera a cuatro patas. Y el cabrón empezó a chupar el coño de mi mujer y a meterle el dedo en el culo, le pasó un poco de lubricante y fue penetrando su polla dentro del coño de mi mujer y los dedos en el culo. Y después de unos minutos de penetración mi mujer empezó a gemir y a ponerse cachonda.
Y me enfadé aún más porque no podía fingir y me dejó claro que lo estaba disfrutando. Y ella gemía intensamente mientras mi jefe la llamaba caliente y le penetraba aún más el coño. Y la traviesa aún le dijo que le penetrara el culo y eso me entristeció aún más. Y el muy cabrón estuvo penetrando el culo de mi mujer y la hizo gozar de lo lindo ese día. Después me separé de ella y volví a vivir con mis padres.
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