Joven gay tiene sexo con electricista travieso de polla grande y gruesa. Hoy te vas a emocionar con esta sensacional historia sobre mí. Soy Felipe, tengo 32 años y trabajo como electricista aquí en Nuevo México y suelo tener muchos clientes y así me acaban llamando mucho. Y un día como otro cualquiera fui a la casa de un señor llamado Roberval, su nevera se había estropeado y fui a arreglarla. Y cuando llegué no sólo era su hijo de 18 años llamado Víctor. Un joven delgado y en forma que me miraba mucho.
Cuando empezó a hablar me di cuenta de que tenía una voz femenina y por su forma de caminar supe que era gay. Y para colmo todavía llevaba un pantalón corto y se le veía buena parte del culo que era muy grande. Pero soy un hombre, estoy casado y amo a mi esposa. El joven me llevó a la cocina y me puse a arreglarlo. Al cabo de un rato volvió para ver si estaba bien y si necesitaba algo y me sorprendió porque llevaba unas bragas muy pequeñas. Le pregunté qué quería así y me dijo que quería un sexo muy intenso y sabroso.
Al mismo tiempo le amenacé con pegarle y el joven se asustó mucho y se fue. Como necesitaba dinero, tuve que terminar de reparar el frigorífico, de lo contrario me habría marchado hace mucho tiempo. Y de nuevo llegó, pero ya con ropa normal y con un sobre en las manos. Me puse un poco nervioso y le dije que no coqueteara conmigo. El joven no dijo nada y me lanzó el sobre, lo cogí y me dijo que lo abriera. Y había mucho dinero en ese sobre, le pregunté qué era y me dijo que ese dinero podía ser mío. Había dos mil dólares en billetes de cien.
Le pregunté qué tenía que hacer para conseguir ese dinero y me dijo que quería tener un buen sexo y que podía ser rápido. Dijo que se correría fácilmente, especialmente con un gran palo en el culo. Estaba muy pensativo porque realmente era mucho dinero y me alcanzaba para pagar todas las cuentas y estar sin deudas y eso fue lo que me hizo tener sexo con este joven. Cogí el dinero y me lo guardé en el bolsillo y le dije que aceptaría hacerlo pero que tendría que ser rápido, sólo 20 minutos y que si se lo contaba a alguien le daría una paliza.
El joven se puso muy contento, me cogió de las manos y me llevó a su habitación donde ya se acostó y se quitó la ropa. Luego se puso a cuatro patas con su gran culo en alto, y pude ver que era realmente hermoso, no tenía pelo y era muy grande y redondo. Fue realmente perfecto y eso lo hizo más fácil y de repente se corrió poniendo su mano en mi polla y sacándola. Me quité la ropa y me tumbé en la cama y el joven bribón empezó a chuparme la polla. Y yo estaba realmente muy excitado porque me chupaba la polla, volviéndome loco de lujuria.
Después de chuparme mucho la polla y dejarla muy dura el safadinho se puso a cuatro con el culo en alto y me pidió que le pusiera mi pene. Y tranquilamente fui metiendo lentamente mi enorme polla dentro del culo de esta safadinha gay que gemía sabrosamente y que me dejaba cada vez más excitado.
Hasta que empecé a penetrar con más fuerza y él gemía aún más fuerte. Y pasaron más de 20 minutos y no quería parar porque era muy sabroso, porque su culo estaba muy apretado. Acabé corriéndome después de 40 minutos en ese culo y me acosté en la cama. El joven también vino a besarme la boca y después me fui con el dinero que me dio.
Vas a enloquecer con esta historia de Esposa follándose a su maldito marido de culo grande. Mi nombre es Lucia, tengo 31 años y les voy a contar como terminé penetrando a mi esposo con un enorme...
LEA ESTE CUENTOPeneté los culos de mis dos alumnos gays ricos y además de tener un placer enorme gané un buen dinero. Mi nombre es Diego, tengo 29 años y hace solo 4 años que comencé a enseñar inglés aquí...
LEA ESTE CUENTOPasé el final de la jornada laboral follando el culo caliente de mi jefe gay travieso que ama un pene dentro de su culo afeitado muy sabroso. Mi nombre es Gustavo Hernandes y voy a compartir con...
LEA ESTE CUENTOLo que les voy a contar a continuación los va a hacer mucho más muy emocionados. Si estás interesado en tener sexo con un travesti, estoy seguro de que querrás hacerlo tan pronto como leas este...
LEA ESTE CUENTOEste Conto ainda não recebeu comentários