La vecina casada y yo tuvimos sexo tarde en la noche

La vecina casada y yo tuvimos sexo tarde en la noche. Mi nombre es Emiliano, vivo en Puebla, una ciudad muy grande aquí en México. Tengo 24 años y trabajo como pintor civil, ayudo a mi tío a pintar las casas que construye o remodela. Y gracias a este buen trabajo puedo vivir solo, vivo en un buen barrio y al lado vive una linda familia. Un hombre llamado Santiago y su hermosa esposa llamada Michelle. Ella es realmente muy hermosa, linda rubia, tiene un culo realmente grande.

Tengo novia, pero ella vive en otra ciudad, al lado y todos los fines de semana voy a visitarla ya veces ella viene a visitarme. Nos gustamos mucho y vivimos felices, cuando se gradúe de la universidad piensa en vivir aquí conmigo. Como soy joven y fuerte, muchas mujeres del barrio me vigilan y últimamente me he dado cuenta de que Michelle me mira demasiado. Y estaba seguro cuando me pidieron que pintara su casa.

Santiago vino a mi casa y me pidió que pintara su casa, y acepté porque me daría un buen dinero. Así que al día siguiente llegué temprano, él ya se había ido a trabajar y Michelle me mostró la casa. Solo sería en el exterior y comencé a trabajar. Estuve pintando todo el día y ella vino por la tarde hablando conmigo y me invitó a tomar un café. Nos quedamos hablando durante horas, y en los días siguientes me fui acercando más y más a esta hermosa mujer.

La vecina casada y yo tuvimos sexo tarde en la noche

Y después de haber pintado la casa, hubo una mañana en que Michelle llamó a mi puerta. Su esposo se había ido de viaje de negocios y ella dijo que escuchó a alguien caminando en su patio trasero. Tomé la linterna y un cuchillo y fui a mirar, pero no encontré a nadie ni señales de que alguien hubiera ido allí. Entonces me pidió que durmiera allí con ella porque estaba demasiado asustada. Y como me dio pena de ella decidí dormir allí, me quedé en el sofá y ella se fue a su cuarto.

Terminé quedándome dormido y me desperté con Michelle chupándome el pene, estaba realmente asustada. Le dije que se detuviera porque ella estaba casada y yo tenía novia. Pero ella no se detuvo y hasta se quitó la camiseta mostrándome sus grandes pechos, y los frotó en mi pene y no pude negarme. Dejé que el travieso chupara mi pene y poco después ella vino y se sentó encima de él. Entonces yo ya estaba locamente cachonda y comencé a penetrar su coño, apretando fuerte su culo mientras nos besábamos.

Entonces Michelle se puso a cuatro patas diciéndome que le metiera el pene por el culo. Yo estaba muy excitado y estaba penetrando el culo de esta traviesa, ella estaba muy excitada con mi pene entrando en su coño. Michelle estaba acariciando su hermoso coñito mientras mi pene entraba en su culo caliente, terminé excitando mucho a esta traviesa y se corrió intensamente. Luego le pedí que se sentara en mi pene nuevamente, y seguí penetrando su culo caliente y me corrí intensamente. Estaba muy sabroso y al día siguiente temprano me fui a casa.