Le chupé la polla a mi padrastro travieso

Llegué a casa muy borracha y le chupé el pene a mi padrastro travieso. Mi madre se casó con un viejo pervertido y siempre quiere follarme. Siempre termino maldiciendo y hasta golpeándolo para que el cabrón me deje en paz. Pero cada vez que salgo de la ducha, o camino en shorts muy cortos, ahí está el viejo mirándome y comiéndome con los ojos. Me da mucha vergüenza y hasta le dije a mi mamá que nunca hizo nada.

Pero un sábado por la noche todo cambió, fui a una fiestita con mis amigos y bebí demasiado. Y cuando me emborracho me pongo muy travieso y me encanta quejarme. Y cuando llegué a casa de madrugada acabé pillando a mi padrastro viendo una peli porno en la tele y masturbándose. Y no pude evitar notar el tamaño de su pene. A pesar de ser un anciano, el bastardo tenía un pene muy grande y grueso.

Estaba mirando ese pene y mi padrastro mirándome sorprendido porque lo había pillado en el acto. Me senté a su lado en el sofá y miré esa enorme polla. El cabrón me miró, vio que estaba muy borracho y decidió aprovecharse de la situación. Tomó mi mano y la colocó sobre su pene. Empecé a acariciarlo y sentir lo grande y grueso que era.

Y no podía seguir pasando mi mano sobre él, también tenía que chuparlo. Y mi padrastro estaba en ese momento recibiendo la mejor mamada de su vida. Nunca hubiera ganado si yo no hubiera estado tan borracho. Pero el pillo aprovechó la situación de verme borracho y me puso a chuparle su enorme y sabroso pene que yo chupé sin piedad.

Llegué a casa borracho y le chupé la polla a mi padrastro

Me caí sobre ese pene gigante y chupé su gran cabeza. El cabrón me apretó la cabeza y siguió haciéndome chupar la punta de su polla. Y ese enorme pene desapareció dentro de mi boca. Y excité mucho a mi padrastro con mi garganta profunda. Sostuvo mi cabeza con más fuerza para que chupara esa polla.

El bastardo también me sacó las tetas y comenzó a agarrarlas. Tengo pechos de tamaño mediano que son muy duros y deliciosos. Y estaba manoseando mis tetas con gran placer mientras le chupaba la polla. Incluso me hizo frotar mis tetas en su polla y lo excitó aún más. Este padrastro bastardo estuvo a punto de correrse en mi boca porque gemía mucho.

Y sin previo aviso sentí una gran cantidad de esperma entrando en mi boca y me lo tragué todo. Así que me fui a mi habitación a dormir y me despedí del viejo bastardo. Y no quedó satisfecho, se coló en mi habitación y aprovechó que estaba borracha para verme el coño. Y este pequeño bastardo levantó mi pollera corta, puso mis bragas a un lado y comenzó a chupar.

Estaba durmiendo pero podía sentir la succión en mi coño. Y confieso que estuvo muy rico, y para completar el cabrón se masturbó y se corrió sobre mi culo. El otro día me desperté toda cubierta de semen y supe que el cabrón había sido yo. No estaba satisfecho con una buena mamada y todavía quería jugar con mi coño. No debí haberle mamado porque ahora todos los días quiere sexo oral.