Me emborraché en el club y un joven gay me llevó a su casa y follamos

Me emborraché en el club y un joven gay me llevó a su casa y follamos. Nunca había tenido sexo con otro hombre, pero confieso que lo disfruté mucho, fue realmente una buena experiencia, muy intensa y placentera. Porque los gays solo tienen el culo para dar, y siempre está apretado y caliente. Acabé penetrando toda la noche el culo de este joven y ni siquiera sabía su nombre. El otro día me desperté a su lado y me dijo que se llamaba Rafael, era muy guapo y tenía un culo enorme y perfecto.

Mi nombre es Francisco, tengo 23 años y vivo en Guadalajara. Tengo una novia hermosa y todavía vivo con mis padres. Y hace 2 semanas mi novia se fue a un programa de intercambio, iba a pasar 3 meses en Ohio estudiando, como es muy inteligente, ganó una beca para quedarse allí durante ese tiempo. Y decidí salir con mis amigos, había una fiesta en una discoteca del centro y decidí ir. Como mi novia se iba a quedar allá con los americanos, yo me iba a divertir de nuevo con mis amigos, hacía tiempo que no salíamos juntos.

Y como no estaba acostumbrado a beber tanto, terminé emborrachándome mucho en esta fiesta. Tomé mucho tequila, varios tragos y el resultado fue que me emborraché mucho al punto de no recordar ni lo que estaba haciendo. Fue entonces cuando apareció Rafael, nunca lo había visto, pero le agradecí por tratar de ayudarme. Me preguntó si quería irme a casa y le dije que sí, porque ya no aguantaba más estar allí y había perdido a mis amigos.

Me emborraché en el club y un joven gay me llevó a su casa y follamos

Pero Rafael no me llevó a mi casa, como yo estaba muy borracho no recordaba la dirección de la casa para hablar con él, así que me llevó a su casa. Dijo que podía pasar la noche allí, y cuando llegamos a su casa empezamos a beber de nuevo y terminé besándolo en la boca. Y me reveló que era gay y que pensaba que yo era muy guapo y que realmente quería tener sexo conmigo. Como estaba muy borracha no pude rechazar su invitación, dejé que Rafael me sacara el pene del pantalón y me lo chupara y me emocioné mucho porque su sexo oral fue maravilloso.

Entonces el joven me sorprendió aún más, se quitó los pantalones y llevaba unas bragas muy pequeñas. Fue a su habitación y trajo un aceite de masaje, se lo frotó en el culo, se puso a cuatro patas en el sofá y me dijo que le penetrara el culo. Y como estaba muy excitado en ese momento comencé a penetrar el culo del joven Rafael. Gimió intensamente con mi pene entrando en su culo apretado y caliente. Le pegué fuerte en el culo y me dijo que era demasiado linda.

Luego de eso Rafael se sentó en mi pene, le apreté el culo, besé su boca y se sentó intensamente. Dijo que era hermosa y que mi sexo era muy bueno, me excitó aún más y estuve penetrando el culo de este joven gay toda la noche. Luego terminamos yendo a su habitación y durmiendo, al día siguiente me desperté asustada y recordé todo lo que había hecho con él. Pero no me arrepentí, cuando despertó terminamos duchándonos juntos y volví a penetrar su perfecto culo.