Me puse dura en la playa viendo a mi cuñada

Tengo una cuñada mucho más caliente. Tiene solo 20 años y un hermoso culo gigante y unos pechos muy calientes. Y no me pude resistir y estuve duro en la playa viéndola en un bikini muy pequeño que me volvió loco de lujuria. Realmente fue una escena hermosa poder ver ese enorme trasero caminando en medio de la playa. Y no me pude resistir, la noche que tuve que visitarla en su habitación del hotel en el que nos alojábamos de aquí de Cancún y ofrecerle un buen dinero a la traviesa me terminó dando la mejor noche de mi vida. Donde tuvimos un muy buen sexo en el hotel y el otro día todavía la follé en la playa.

Todo sucedió cuando decidí llevar a mi esposa e hijos a la playa de Cancún, y mi esposa me preguntó si podía llevar a su hermana. Natalia, una hermosa jovencita de culo gigante que siempre me puso muy cachonda. Y como tendría la oportunidad de verla en bikini, acepté llevarla sí. Y nos fuimos, nos alojamos en un hotel frente a la playa y nos fuimos a bañar al mar. Y en ese momento estaba sentada en la silla tan vidriosa viendo a mi cuñada en bikini que me puse dura en la playa. Y tuve que ocultarlo para que mi esposa no se diera cuenta.

Otra vez estaba yo en el agua y mi cuñada también, muy cerca de mí y otra vez estaba dura en la playa. Estaba loco de lujuria y decidí que intentaría por todos los medios follar a mi cuñada. La noche en que mi esposa estaba durmiendo, fui a la habitación del frente donde estaba mi cuñada. Le pedí que pasara y la traviesa se fue, y como tenía apartada una buena cantidad de dinero decidí invertir en esta jovencita. Y dijo que este viaje no sería gratis y que aún le daría 500 dólares para que ella disfrutara el resto de los días allí con nosotros.

Me puse dura en la playa y me follé a la cuñada

Mi cuñada se asustó mucho por la invitación que le hice. Pero vio que no tenía otra opción, si quería que siguiera pagando sus gastos de viaje, tendría que hacerme un favor. Y ella dijo que nunca volvería a hacer eso en su vida porque lo que estaba haciendo estaba muy mal. Y me pidió los 500 pavos porque le dije que no me jodía gratis. Transferí el dinero a su cuenta y la niña traviesa me pidió que me quitara la ropa y me acostara en la cama. Y ella se quitaba la ropa y me volvía loco de lujuria.

Me asusté al ver ese culo enorme y las tetas calientes que tiene la joven cuñada. Ella vino a chupar mi pene y se sentó en mi polla. Porque sabía que si me corría muy rápido, todo tomaría muy poco tiempo. Y ella tenía razón, unos minutos sentado en mi polla no pude resistir y terminé corriéndome en su coño caliente. Pero no iba a dejar de follarme a esa perra una vez más. Así que decidí subir la apuesta y ofrecí otros $300 por unos minutos más de sexo. Ella dijo que solo lo haría por otros 500 y no tenía otra opción. Transferí otros 500 reales a su cuenta y fui a su habitación, pero cuando llegó dijo que el sexo sería en otro lugar.

Fuimos a la playa y ella se metió en el agua y me pidió que me metiera también. Y de nuevo me puse dura en la playa viendo a mi cuñada ponerse el bikini de lado y enseñarme ese culito perfecto y caliente. Y llegué a ella y comencé a penetrar su coño en el agua y la traviesa gemía muy sabroso, colgada en mi regazo y rodando lentamente sobre mi pene. Y yo penetrando con ganas a la traviesa, y de nuevo a los pocos minutos no me pude resistir y terminé disfrutando de la traviesa. Definitivamente fue el dinero más fácil que hizo y llegué en el tiempo más rápido de toda mi vida. Pero valió la pena tanto para mí como para ella.