Me vine con la esposa casada de mi hermano

Estarás muy emocionado con esta historia real que nos pasó a mí y a mi deliciosa cuñada. Mi nombre es Sergio y solo tengo 22 años. Sigo viviendo con mis padres y estos meses anteriores vino a visitarnos mi hermano mayor junto con su mujer que es una rubia deliciosa con silicona y trasero ancho muy deliciosa. Mi hermano es ese tipo al que le fue bien en la vida, así que se casó con una mujer muy buena. Es que ella es demasiado para él, porque es un gordito sedentario que vive fumando por lo que no le alcanza el aliento para esa perra.

Y como la casa aquí es pequeña para todos, mi cuñada y mi hermano se quedaron unos días en mi cuarto y yo tuve que dormir en la sala. Estaba muy nerviosa porque no quería salir de mi habitación, pero no tenía otra opción, mis padres lo ordenaron y tuve que obedecer su orden.

Luego llegó la noche y me fui a dormir a la sala, y tengo la costumbre de masturbarme todas las noches antes de irme a dormir. Y como tenía mucha necesidad de hacer esto decidí masturbarme viendo xvideos en el sofá de la sala. Apagué todas las luces y me puse los auriculares. Y se me había olvidado un detalle. Lo cual era no estar en mi habitación y tener la oportunidad de que alguien apareciera en cualquier momento y me atrapara en el acto.

Entré en la casa durante el amanecer.

Estaba toda emocionada viendo una porno y no vi venir a mi cuñada. Y ella se quedó paralizada mirándome con el pene afuera viendo puteando y masturbándome como una pervertida. Y le gustaba lo que estaba viendo, hasta que accidentalmente chocó contra la mesa al lado del sofá y pausé el video y miré hacia atrás. Y ahí estaba ella viéndome todo asustado con la verga afuera.

Entonces como ya era una situación embarazosa decidí mejorar el ambiente entre nosotros y le pedí sexo. Tenía que arriesgarme, porque una escena así nunca volvería a suceder. Y ella aceptó, me dijo después que llevaba casi 20 días sin follar porque mi hermano no la follaba bien.

Luego tuve que satisfacer a mi hermosa cuñada y darle lo que más deseaba. Un sexo muy agradable y muy guarra para hacerla disfrutar bien. Y la puse a chupar mucho mi enorme pene haciéndola súper excitada. Después de eso, metí mi pene con presión sobre esta rubia caliente y chupé mucho sus senos de silicona.

Hasta que después de poner mucho me quiso dar una mama más en el pene y no pude más. Terminé corriéndome por toda la cara y también untándole la boca con esperma. Se ensució toda y tuvo que correr a la cocina para lavarse la cara en el fregadero. Luego se fue a dormir como si nada hubiera pasado.