Mi esposo bebió demasiado y quería ser penetrado

Mi marido bebía demasiado y quería ser penetrado. Algo muy diferente, al menos para él que siempre lo pagó como un padre de familia machista y conservador. Pero ellos son los que siempre esconden algo, y después de 14 años de matrimonio decidió armarse de valor y proponerme matrimonio. Y todavía borracho, porque sobrio nunca tendría el coraje de pedirme algo así. Eso es lo que les voy a contar aquí, les voy a revelar todo lo de ese día que me parece muy emocionante.

Era la primera vez que lo hacía también, nunca había penetrado a un hombre, nunca me había follado a un hombre en mi vida. Pero mi esposo vino con este pedido, estaba muy borracho, pero yo sabía en el fondo que él quería, no tenía el coraje, pero como había bebido demasiado decidió no ocultarlo más, y eso me gustó. el confio en mi Y quería aventurarme a hacer algo diferente durante el sexo, después de todo ellos han estado casados ​​durante 14 años, mucho tiempo, el sexo se está volviendo más frío.

Un día nuestros hijos se habían ido de vacaciones y nos quedamos. Mi esposo tiene una empresa y no puede ausentarse mucho, y me quedé con él para celebrar nuestro aniversario de bodas juntos y, lo mejor de todo, sola. Entonces, en este día especial de 15 años de matrimonio, compramos muchas bebidas, buena comida y solo estábamos nosotros en casa celebrando. Ese día compró un vino importado, era una fecha especial, se merecía un trago especial.

La cosa es que nos pusimos muy locos, muy borrachos. Y después ya nos hemos bebido 2 botellas enteras de vino y estamos en la cama intercambiando besos desnudos. Mi marido me sorprende haciéndome un pedido inusual. Dijo que nunca había tenido un pene en el culo y que realmente lo quería. También completó diciendo que un día vio en la televisión que los especialistas decían que el orgasmo en los hombres puede ser aún más fuerte si les penetran el culo.

Tenía curiosidad, y decidí cumplir con su pedido, tengo un pene de goma escondido. Porque cada vez que mi esposo no puede follarme bien, termino con este pene. Y me encanta masturbarme de vez en cuando. Entonces el cabrón se puso a cuatro patas, le froté un poco de aceite lubricante en el culo y comencé a meterle los dedos, ni lo sintió. Me reveló qué dedos pone siempre y que puede manejar mi pene de goma. Incluso me reveló que lo ha usado un par de veces.

Me sorprendió que me lo ocultara, pero como estaba borracho no quería pelear, solo hacer lo que él quería. Tomé el pene de goma y se lo estaba metiendo duro en el culo, me pidió cachetadas y yo estaba golpeando y metiendo al cabrón. Y así se corrió sabroso, luego me acertó y me comió el culo con más fuerza y ​​me corrí intensamente. Después de ese día usamos mi juguete sexual juntos.