Mi mejor amiga y yo nos follamos al profesor. Un sexo caliente e intenso que nos dejó a los dos muy excitados. Hicimos esto porque necesitábamos buenos resultados en los exámenes y también porque nos dio mucho dinero. Mi nombre es Camila y mi amiga Roberta, tenemos 18 años cada una y vivimos en Guadalajara. Y ya estamos en nuestro último año de secundaria y en cuanto nos graduemos queremos ir a Miami y tratar de ganar más dinero con el sexo.
Pero para eso necesitaba graduarme y ella también, el problema es que teníamos muy mala nota. Nunca fui bueno en física y ella tampoco, así que estábamos a punto de reprobar esa clase. Pero como trabajamos en secreto como prostitutas, tratamos de convencer a nuestro profesor de tener sexo con él a cambio de buenas notas. Porque mis padres me dejarían ir allí solo si aprobaba todas las materias. No sabían que iba a vivir, pensaron que me iba de vacaciones y volví.
Porque no saben que gano dinero como prostituta, y ya logré ahorrar mucho dinero. Y por joder con un policía hasta sacamos pasaportes para poder entrar a Miami sanos y salvos. Nuestro mayor obstáculo fue aprobar en física, lo cual era imposible de la forma correcta en que se estudiaba. Así que el otro día tuvimos el último examen de física del año. Nos quedamos hasta el final de la clase y cuando estábamos solos Roberta, el profesor y yo, nos acercamos a él. Yo siendo travieso, le expliqué todo, dije que éramos prostitutas y que teníamos que salir bien en su prueba.
Lo dejamos bastante sorprendido con esta revelación, pero le gustó lo que escuchó. Así que hice la oferta, le pregunté si aceptaría hacer este intercambio y al mismo tiempo me dijo que aceptaría. Entonces el cabrón nos dio su dirección y después Roberta y yo fuimos a su casa. Vivía con su madre, era un joven maestro de 32 años. Era todo un nerd, no tenía novia y vivía en los videojuegos. Entonces aceptaría tener sexo con nosotros, sobre todo porque nunca había tenido sexo con 2 jóvenes al mismo tiempo.
Nada más llegar tuvimos que guardar silencio, entramos en su habitación y el cabrón pidió un strip tease. Así que Roberta y yo comenzamos a quitarnos los vestidos muy lentamente mientras intercambiábamos besos en la boca. Esto emocionó mucho a nuestro profesor, luego se corrió e intercambiamos deliciosos besos en la boca. Sacó su pene y Roberta y yo empezamos a chupar su enorme pene. Era muy grande y sabroso, se tumbó en la cama y los dos le chupamos su gran pene.
Entonces Roberta fue la primera en sentarse encima de él, mientras tanto yo frotaba mi coño en su boca. Luego nos pidió a los dos que nos quedáramos a cuatro patas en la cama. Entonces él estaba golpeando nuestro culo y penetrando nuestro coño, y el bastardo todavía quería penetrarme el culo y tuve que dejarlo. Me lastimó el culo al penetrar mi ojete con su enorme pene, pero se corrió bastante rápido y después de eso nos fuimos antes de que su madre despertara. Fue una noche preciosa, nos cambió de nota y aprobamos física y tuvo el mejor sexo de su vida.
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