Mi profesor quería sexo y me senté en su pene

Mi profesor quería sexo y me senté en su pene porque necesitaba buenas notas en sus exámenes. ¿Qué harías si un maestro te diera dinero y te prometiera darte las mejores calificaciones en tus exámenes? No pude resistirme a esa invitación, era demasiado buena para rechazarla. De esa manera accedí a tener sexo con mi profesor gordo bastardo. No es guapo en absoluto, pero por otro lado es rico y todavía podría darme las mejores notas en los exámenes y no tendría que estudiar tanto para su materia.

Mi nombre es María Luisa, tengo 18 años y vivo en San Luis Potosí. No puedo decir el nombre de la escuela donde estudio, pero mi maestro se llama Rafael. Me enseña lengua mexicana, gramática y esta materia es muy difícil. No me estaba yendo muy bien e incluso podría fallar por eso. Es que soy una jovencita guapa y ahora que mis padres me dejan salir a fiestas lo estoy disfrutando mucho, y confieso que terminé sin estudiar como debía y entonces empezaron a surgir los problemas.

En las demás materias me iba bien, pero con Rafael todo era más difícil. Tiene 46 años, gordo y feo, pero tiene mucho dinero, y siempre me miraba intensamente. Esa mirada lujuriosa, y comencé a burlarme de él. Yo también lo miré con ganas, seguí sonriéndole y un día el cabrón me pidió que lo esperara al final de la clase. Obedecí, esperé a que todos los demás estudiantes se fueran y me acerqué a él. Y el gordo bastardo tomó mi mano, me dijo que diera la vuelta y le mostrara mi cuerpo. Entonces me propuso matrimonio, dijo que me daría dinero y las mejores notas.

Mi profesor quería sexo y me senté en su pene

Dije que lo pensaría y me fui, pero primero le di mi número de teléfono. Más tarde ese mismo día me pidió mi número de cuenta bancaria, pasé y en poco tiempo tuve un gran susto. El bastardo me había enviado 200 dólares y dijo que era solo el comienzo y que si lo hacía feliz, él también me haría feliz. Y mandó una foto de la nota que él cambió, yo había sacado 4 y me cambió la nota a 10. Yo estaba muy feliz y dije que acepté su acuerdo, así que ese mismo día, en la noche, pasó por mi casa en su coche y me llevó a un motel.

Ya adentro del auto tuve que ir chupándole el pene hasta que llegamos al motel. Y era un motel muy lujoso que tenían aquí, cuando entramos me pidió que hiciera una tira. Me subí a un pequeño escenario y comencé a quitarme la ropa, luego me lancé a los brazos del gordo cabrón y me estaba chupando los senos, me tiró sobre la cama y comenzó a chuparme el coño y me estaba metiendo los dedos en el culo. . Después de eso me senté en su pene y besé su boca. A pesar de estar gordo tenía mucha energía, y lo estaba disfrutando, era la primera vez que tenía sexo con un cabrón gordo.

Después de sentarme en su pene, estaba a cuatro patas encima de la cama. Volvía a meter el dedo en mi culo y al mismo tiempo penetraba mi coño. Y de repente me preguntó qué no quería, que me penetrara el culo, pero tuve que dejarlo. Usé mucho aceite lubricante porque su pene era muy grueso, y lentamente penetró mi culo, dejándome todo magullado. Pero aguanté porque el precio que pagó fue demasiado alto, después del sexo anal no pudo más, pedimos una pizza y luego me llevó a casa. Y así terminó mi primera noche de puta.