Mi profesora de inglés me pidió que le penetrara su culo virgen

Mi profesora de inglés me pidió que le penetrara su culo virgen. Me llamo Lucas y os voy a contar esta experiencia que tuve el año pasado con mi profesora de inglés, una mujer preciosa dueña de unas tetas grandes perfectas y un culo precioso y ancho y sabroso. El único problema era que estaba casada pero le gustaba engañar a su marido siempre que podía. Y como él viajaba mucho por trabajo, a veces ella lo engañaba, pero nadie se enteraba.

Yo mismo pensaba que se trataba de gente que se inventaba historias, pero un día me sorprendió esta mujer traviesa. Un día salía de clase y me llamó. Me dijo que la acompañara hasta su coche en el aparcamiento. Decidí ir, lleno de curiosidad, y cuando llegué al coche, la traviesa me dijo que tenía muchas ganas de acostarse conmigo y que me pondría las mejores notas en todos los exámenes y me iría muy bien en su asignatura. Me quedé pensativo pero al final acepté porque realmente necesitaba su ayuda para no volver a repetir todo.

La traviesa me dijo entonces que fuera a su casa por la noche, que su marido viajaría y ella se quedaría toda la noche sola. Y yo estaba allí para ver esta safadinha y como resultado terminamos haciendo un sexo muy sabroso e intenso donde penetré sin florituras el coño y el culo caliente de esta hermosa morena traviesa. Era la primera vez que tendría alguna polla entrando y sabiendo dentro de su culo, y le encantó haber tenido sexo anal por primera vez e incluso con un estudiante, mucho más joven que su marido y mucho mejor a la hora del sexo.

Cuando llegué a la casa de la madura traviesa ella llevaba una lencería muy provocativa, y eso me excitó mucho e hice que se corriera intensamente varias y varias veces. Y te contaré cómo ocurrió todo entre esta safadinha de gran culo y sabrosos pechos y yo. Mi profesor me llamó para que entrara y yo ya estaba sacando mi pene y sentándome en el sofá de la habitación. Y la traviesa vino a chuparme la polla con facilidad, mientras me hacía un sexo oral muy sabroso chupando mi polla me hacía cariño en los huevos.

Entonces dijo que se sentaría en mi polla pero que primero tendría que chupar su coño caliente. Y yo estaba lamiendo ese coño sin pelo y chupando también los sabrosos pechos de esta traviesa. Después se quedó cuatro con el culo en alto y tuve que lamerle el culo caliente dejando al travieso todo tembloroso y con una enorme erección. Hasta que me pidió que le penetrara el pene y yo le penetraba con fuerza su delicioso coño. Ella gimió y me llamó jovencito caliente mientras mi polla entraba con fuerza.

Después de penetrar mucho en su coño llegó el momento de que mi polla entrara en su culo. Pasó mucho lubricante en su culo caliente y luego comencé a penetrar su culo con voluntad. El culo apretado y perfecto por primera vez estaba teniendo una polla muy grande y gruesa entrando en él. Decía que su marido estaba lleno de florituras y que nunca quiso penetrar en el culo de la traviesa. Y yo estaba penetrando sin florituras y como resultado esta rubia traviesa consiguió el culo ardiente y bien abierto.