Tuve sexo anal caliente con el padre de mi novio y disfruté intensamente en este sexo intenso y sabroso con el viejo bastardo. Mi nombre es Julia, tengo 19 años y soy una hermosa rubia delgada con una maravillosa cara de modelo y tengo un hermoso cuerpo. Tengo unos pechos grandes y duros y un culo redondo perfecto. Mi día a día es estudiar, ir al gimnasio y luego ir a casa de mi novio. Un joven de mi edad que es bastante rico, de hecho sus padres son ricos, dueños de una cadena de farmacias realmente tienen mucho dinero y viven en una hermosa casa enorme aquí en Cancún.
Y no voy a mentir, salgo con Carlos por su condición económica, por ser muy rico me interesaba mucho, porque realmente quería tener esta vida de lujo y él me proporcionaba todo esto. Como viajes por todo el mundo, paseos en coches de importación y además siempre me hacía varios regalos. Pero su padre, el dueño de toda esa fortuna empezó a prestarme mucha atención. Un anciano de 49 años, no puedo decir su nombre pero empezó a mirarme con otros ojos, esa mirada de deseo, porque sabemos cuando alguien nos está deseando.
Un día me sorprendió mucho, había llegado a su casa como siempre, acababa de salir del gimnasio, estaba cansado de hacer ejercicio tan intensamente. Y mi novio todavía no había llegado del trabajo, porque ayuda a su padre a ocuparse de todo. Pero su padre estaba allí y me llamó a su habitación, dijo que necesitaba hablar conmigo de algo muy importante y fui a ver de qué se trataba. Cuando llegué llevaba una bata y me pidió que cerrara la puerta, le pregunté por qué y me dijo que la cerrara y abriera la caja que estaba debajo de la cama.
Obedecí y luego abrí la caja y me llevé un gran susto. Era un maravilloso collar de diamantes y también había una tarjeta de crédito. Me dijo que mi novio, su hijo, no me gustaba porque nunca me había hecho regalos de ese tipo y todavía no me había dado una tarjeta de crédito sin límite para que pudiera comprar lo que quisiera. También me dijo que como su amante tendría todo esto y más, que me cambiaría la vida, a diferencia de mi novio que un día se cansaría de mí. Y antes de que pudiera decir nada vino y me besó en la boca y empezó a quitarme la blusa y no pude resistirme.
Estaba apestoso y ya me estaba quitando el collar y poniéndolo en el cuello diciendo que me merecía una joya hermosa como un diamante. Luego siguió chupándome los pechos y yo, realmente hipnotizada por aquel viejo seductor, dejé que me quitara los calzoncillos y me tirara en la cama. Me quitó las bragas y empezó a chuparme el coño y yo me retorcía en la cama. De repente su polla entró y me besaba la boca mientras su polla entraba en mi coño, volviéndome loca de lujuria.
Luego dijo que quería verme sentada sobre su polla y me puse encima de él y me revolqué sobre su polla. Gemía y me decía que era la chica más guapa que había besado en su vida y me chupaba los pechos mientras me daba palmadas en el culo y me penetraba el coño. Hasta que me corrí, porque estaba demasiado excitada recibiendo esos piropos y la polla en mi coño y entonces él también se corrió. Fue un sexo muy sabroso y después de ese día nos convertimos en amantes y hasta el día de hoy hacemos sexo muy sabroso, todavía sigo con su hijo pero lo prefiero a él.
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