Tuve sexo en el estacionamiento del centro comercial

Tuve sexo en el estacionamiento del centro comercial y tuve un orgasmo muy agradable. Mi nombre es Guadalupe y les estaré contando sobre un evento que me dejo sumamente emocionada. Tuve sexo en un estacionamiento con mi compañero de trabajo. Su nombre es Ignacio, pero su apodo es Nacho, él trabaja conmigo en este centro comercial en Guadalajara. Trabajamos en el área de seguridad del centro comercial, llevamos como 5 años juntos y por eso somos muy unidos.

Como hablo más con Nacho que con mi propio marido, las cosas se pusieron intensas entre nosotros. Más aún después del día que me enteré que mi esposo me engañaba con una colega de su trabajo. Estaba devastado cuando tomé su teléfono y vi los mensajes. Estaba dispuesto a separarme después de esta traición, pero primero quería venganza. Y como Nacho ya ha intentado follarme varias veces y me negué, esta vez sería diferente.

Así que al día siguiente del descubrimiento de la traición me acerqué aún más a Nacho. Trabajamos juntos, hacemos las rondas juntos porque nuestro jefe nos separa 2 a 2 para hacer las rondas. Y ese día comencé a hablar de cosas muy feas con él e incluso al final del día le dije que mi esposo me había traicionado y que me vengaría. Nacho me fulminó con la mirada y dijo que sería un honor ayudarme, y que podíamos hacerlo ahora en su auto.

Tuve sexo en el estacionamiento del centro comercial

Y dentro del vestuario terminé besando a este cabrón y nos fuimos al estacionamiento donde estaba su auto. Y ahí nos metimos por el asiento trasero y empezamos a darnos besos ardientes. Nacho tenía muchas ganas de follarme, prácticamente me arrancó la ropa y empezó a chuparme los pechos. Luego me dio muchas lamidas en el coño y yo estaba mojada de lujuria. Para colmo, vi ese pene caliente y tuve que chuparlo fuerte.

Como Nacho tenía muchas ganas de follarme y se emocionó al conseguirlo, acabó corriéndose en mi boca. En menos de 5 minutos hice correrse al cabrón y tuve que tragarme su semen. Pero su deseo era muy grande y en menos de 2 minutos volvió a tener el pene duro por lo que me abrió de piernas y empezó a penetrar con su gran polla. Y yo gemía acaloradamente mientras dejaba que Nacho me llenara el coñito caliente con su pene grueso y grande.

Luego quise revolcarme con esa gran polla y puse muy feliz a Nacho. Me dio una palmada en el culo con fuerza y ​​me emocionó mucho. Esto hizo que me sentara cada vez con más fuerza sobre su pene y así me senté hasta que disfruté de ese gran pene. Pero tuve que aguantar y seguir sentada hasta que Nacho se corrió por segunda vez dentro de mí. Al final me llevó a casa y cuando llegó mi marido le conté todo. Nunca más me traicionaron y al poco tiempo terminé divorciándome y quedándome definitivamente con Nacho.