Tuve sexo lésbico caliente con mi amiga tetona

Tuve sexo lésbico caliente con mi amiga tetona y tuve un intenso orgasmo aquí en mi habitación. Mi nombre es Mariana, tengo 18 años y vivo en Guadalajara con mi padre, mi madre vive en Tijuana y prefiero quedarme aquí porque la ciudad es mejor y tengo más amigos aquí, sobre todo Carol, una gran amiga que terminó enseñándome cosas muy sabrosas y aquí les contaré lo que me enseñó que me hizo tener el mejor orgasmo de mi vida. Soy heterosexual, sexual, me gustan los hombres, incluso tengo un novio que se llama Rubens y nos llevamos muy bien.

Pero un día todo esto cambió cuando mi amiga Carol vino a estudiar aquí en casa. Al día siguiente teníamos un examen muy importante, así que como tenía muchas dificultades en esta asignatura vino a mi casa para que estudiáramos. Carol tenía un secreto, nunca había contactado conmigo hasta ese día. Después de haber estudiado mucho, dijo que estaba muy cansada y que quería relajarse un poco para poder estudiar más. Luego me llamó para ver la televisión, fuimos al salón y nos pusimos a ver la televisión y a hablar.

Pero Carol se acercaba cada vez más a mí y empezó a poner su mano en mis piernas. Le dije que parara, pero fue inútil. Siguió poniendo sus manos en mis piernas y subiendo a mi coño y esto me ponía cada vez más cachondo. Luego metió la mano dentro del pantalón y empezó a acariciar mi coño. Le pedí que lo dejara de nuevo, pero fue testaruda y siguió. Y cada vez era más delicioso, empecé a gemir muy suavemente y cuando miré a mi amiga estaba muy excitada.

Y no pude seguir mirándola con esa cara tan traviesa y empezamos a besarnos. Y metió su mano cada vez más dentro de mis pantalones hasta que su dedo entró en mi coño y eso me mojó mucho. Me sacó los pechos y empezó a chuparlos. Y no pude resistirme y dejé que me chupara los pechos con voluntad, luego se quitó la blusa y estuvo frotando sus grandes y perfectos pechos en mi cara. Y yo estaba toda excitada y chupaba los hermosos pechos de mi mejor amiga que era lesbiana.

Este era su secreto y después de chuparme los pechos me quité los pantalones y las bragas y me tiró en el sofá y empezó a chuparme los pechos y el coño. Cada vez estaba más excitada y empezó a meterme los dedos en el coño mientras me chupaba intensamente. Tuve que controlarme para no gemir demasiado fuerte y dejar que siguiera con este delicioso trabajo que me estaba poniendo muy cachondo.

Entonces la hermosa Carol se puso encima de mí y empezó a frotar su delicioso coño en el mío. Esto fue demasiado para mí y empecé a gemir cada vez más fuerte, excitándome cada vez más. Hasta que tuve un delicioso orgasmo y después estuve muy cansada. Todos los días Carol venía a mi casa y teníamos sexo todo el día en el sofá, en la cama, en el suelo, en cualquier sitio.