Viejo casado haciendo sexo gay con jardinero de gran polla que lo pone todo en el travieso y le hace disfrutar intensamente. Me llamo Diego, tengo 26 años y trabajo como jardinero, también he trabajado como albañil, en supermercados, en realidad trabajo de todo. Pero actualmente estoy trabajando como jardinero, ayudando a mi padre. Y como siempre acepto cualquier tipo de trabajo, un vecino llamado Rogerio me pidió que limpiara el pequeño jardín de la parte trasera de su casa. Como iba a pagar un buen dinero, le dije que lo limpiaría el mismo día. Y dijo que no podría, sólo al día siguiente por la mañana.
A la mañana siguiente, temprano, fui a su casa y descubrí por qué me dejó ir sólo ese día. Quería estar a solas conmigo, y como su mujer siempre va al gimnasio por la mañana y pasa casi 2 horas allí, tendría mucho tiempo conmigo. Nada más llegar a su casa me ofreció un café y me dijo que era una morena fuerte y guapa. Me pareció extraño y no le contesté, cambié de tema y le pregunté por el jardín y volvió a retomar el tema y dijo que no tenía jardín. En ese momento estaba muy enfadado.
Cogí mis cosas y empecé a irme cuando me dijo que mirara hacia atrás y que tenía un montón de dinero en sus manos y no pude quedarme quieto, cogí el dinero y le pregunté qué quería. Y el cabrón dijo que un sexo caliente y que tenía ese secreto de gustarle recibir grandes pollas en el culo. Y también dijo que siempre pagaba mucho por esto y que había algunos jóvenes en el barrio que recibían mucho dinero por este favor. Así que acepté el dinero porque lo necesitaba mucho y eran casi 1600 dólares por sólo media hora de sexo.
Entonces me dio el dinero y me tiró en el sofá y empezó a quitarse la ropa. Y me daba asco ver a ese viejo desnudo, pero tenía que hacer el trabajo. Nunca había tenido sexo con otros hombres, pero por dinero iba a hacerlo por primera vez. Después de desnudarme el viejo me dijo que me quitara la ropa. Con gran vergüenza me desnudé también y empezó a chuparme el pene. Y estaba teniendo sexo gay por primera vez con mi travieso vecino.
Después de chuparme intensamente este bribón me dijo que le penetrara mi pene en el culo. Y así hice lo que me dijo, al fin y al cabo me estaba pagando mucho para que tuviera sexo gay por primera vez. Este cabrón entonces me pasó un poco de aceite por el pene y empezó a sentarse encima y confieso que estaba disfrutando porque su culo estaba muy apretado y por eso no pude aguantar mucho y acabé corriéndome.
Vio que había disfrutado y siguió sentado y nos quedamos una media hora así donde yo llegué y él también. Después de eso empecé a ir a su casa una vez a la semana para meter mi pene en su culo caliente.
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