Mi sobrina quería practicar anal por primera vez

Mi sobrina quería practicar anal por primera vez. Como ella y yo tenemos una relación oculta, tenía que cumplir su fantasía. Y como todo lo que me pide que haga, tenía que hacerlo y estaba delicioso. Penetrando un ojete que nunca antes había recibido un pene, excité mucho a esta jovencita y puede recibir un pene en su culo por primera vez. Seguro que esta historia te emocionará mucho. Si te gusta el incesto y el sexo anal, te encantará leer esta historia real.

Mi nombre es Francisco, pero puedes llamarme Paco. Tengo 34 años y vivo en São Miguel de Alende, trabajo como gerente de supermercado y estoy divorciado. Estuve casado durante 5 años, pero no funcionó muy bien y preferimos divorciarnos. Y en ese mismo momento vino a vivir conmigo mi sobrina Rafaela. Es una chica de 19 años, logré encontrarle trabajo aquí en el supermercado y vino enseguida. Ha estado viviendo aquí durante unos 2 años y vivimos en mucha armonía.

Ya escribí una historia aquí hace unos meses sobre la primera vez que tuve sexo con mi sobrina. Ella había bebido mucho un día aquí en la casa, yo también bebí mucho tequila y como resultado practicamos un sabroso incesto. Tuvimos nuestra primera relación sexual y fue tan caliente. Ella tomó la iniciativa, no me pude resistir y terminé penetrando su delicioso coño. Pensé que tenía suficiente historia que contar, pero el fin de semana pasado sucedió algo muy bueno.

Mi sobrina quería practicar anal por primera vez

Mi sobrina Rafa nunca antes había tenido sexo anal y realmente quería tener sexo anal. Una vez que comenzamos a tener relaciones sexuales, comenzamos a tener una relación amorosa oculta. En la calle y en el trabajo éramos tío y sobrina, pero aquí en casa somos compañeros. Y llevamos 5 meses haciendo esto y os confieso que me gusta mucho follar con mi sobrina. También le encanta tener sexo conmigo y siempre pide más.

Y el sábado pasado estábamos viendo la televisión y se le ocurrió esta historia de que quería practicar anal. Traje un poco de lubricante y empezamos a besarnos en los labios. Luego ella estaba sin ropa y yo le estaba chupando el coño y pasándole el lubricante por el culo. Empecé a meter el dedo en el culo de mi sobrina y ella gemía deliciosamente. Eso me excitó demasiado, ella se acostó con el culo en alto y comencé a meterme la polla. Muy lentamente porque no quería lastimarla.

Así que muy suavemente fui penetrando el culo de mi hermosa sobrina. Ella se acostó de costado y yo continué, esta vez logré meter toda mi polla dentro de su caliente culo. Ella también quería ponerse a cuatro patas y de nuevo la estaba penetrando de buena gana. Mi hermosa sobrina gemía mucho y decía que hacía demasiado calor para tener un pene dentro de su culo caliente. La penetré de buena gana y ella fue acariciando su coño hasta que se corrió. Al final aun así me dejó correrme en su culo, hicimos un anal muy rico y valió mucho la pena.