Tuve sexo con una camarera durante la fiesta. Era el cumpleaños de mi tío Soares, tiene 59 años y quería celebrar su 60 cumpleaños. Invitó a toda la familia a su casa y nos reunimos todos para celebrar. Como tiene mucho dinero, hizo una gran fiesta, varias personas, una banda tocando y mucha comida y bebida. Y también había varios camareros y camareras sirviendo comida y bebida a todos los invitados.
Y le eché el ojo a una mesera joven y morena con un culo realmente grande. Ella debe tener mi edad, tengo 27 años y desde que estaba soltero pude disfrutar de esta fiesta. Como la mayoría eran parientes no me interesaba, pero esta camarera me estaba volviendo loco de lujuria. Y, sin embargo, cada vez que le pedía un trago, la niña traviesa me sonreía. Empezamos a hablar y como estaba muy borracho terminé intentando besarla y ella se negó al mismo tiempo.
Así que me rendí, pensé que ella no quería tener nada que ver conmigo. Pero después de unas horas, hacia el final de la fiesta, me llama. Seguí a esta mujer del culo caliente hasta que me llevó a un cuartito donde mi tía guarda escobas y productos de limpieza para la casa. Entramos en esta pequeña y oscura habitación y allí esta niña traviesa comenzó a besarme en la boca. Dijo que rechazó mi beso en ese momento porque estábamos en medio de todos y su jefe estaba allí.
Intercambiamos besos intensos y ella me sacó el pene y nos dijo que nos fuéramos rápido porque necesitaba volver al trabajo. Creo que ella estaba pensando que porque mi tío era rico yo también lo sería, pero no lo soy, solo mi tío. Pero ella no necesitaba saber eso en ese momento y yo estaba dejando que el travieso me chupara el pene. Ella se arrodilló y me estaba chupando intensamente, y yo estaba muy emocionado con este perfecto y sabroso sexo oral.
Esta chica traviesa se levantó después de chuparme el pene y se quitó los pantalones. Solo se quitó los pantalones porque dijo que tenía prisa y necesitaba volver al trabajo. Pero él quería tomarse un tiempo para tener un buen sexo conmigo. Se puso de pie con las manos apoyadas en la pared y yo me arrodillé y comencé a lamer ese culo travieso y también su coño caliente. Entonces mi pene estaba entrando en su coño y ella gemía muy sabroso.
Así iba dejando muy emocionada a esta hermosa mujer. Mi polla estaba entrando agresivamente en su coño y ella dijo que estaba demasiado caliente. Luego me dijo que me acostara en el piso, obedecí a la traviesa y ella se vino encima de mí rodando alrededor de mi pene. De esa manera me estaba emocionando más y más, pero ella fue la que llegó primero. Y cuando me toco correrme, no me dejo correrme en su coño, porque tenia que volver al trabajo, se fue y dijo que me volveria a ver mas tarde. Pero ella se fue y ni siquiera vi irse a la niña traviesa, pero de todos modos fue genial.
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