¿Qué tal leer una buena historia sobre el día que me follé a mi prima después de manipular su jugo por la tarde? Les cuento como hice esto con mi primito que tenia 21 años y me estaba emocionando mucho. No soy la más hermosa, y como mi prima es muy hermosa, nunca quiso ni siquiera besarme en la boca. Lo he intentado varias veces y siempre me rechaza. Y ahora que somos más grandes, no solo quiero besarla, sino follármela muy cachonda.
Pero yo seguía siendo rechazado por ella, y siempre viví con mi prima. Porque sus padres murieron cuando ella era muy pequeña y se vino a vivir con mis padres, sus tíos. Siempre fuimos muy unidos y siempre nos llevamos muy bien. Pero teniendo una relación extra conmigo, ella nunca quiso. Pero el deseo que tenía por ella crecía cada día.
Y ese deseo aumentó aún más un día que me escondí debajo de la cama en su habitación y la vi cambiarse de ropa para salir con su novio. Y pude ver sus grandes y perfectas tetas, su buen culo suave y su coño completamente afeitado. Una jovencita muy perfecta y ardiente. Ese día me masturbé 3 veces seguidas pensando en ella desnuda.
Y después de ese día decidí que me iba a follar a mi primito de una forma u otra. En la escuela perseguí a mi amigo que vendía unas drogas y me dio un tranquilizante muy fuerte. Lo puse en la botella de jugo de mi prima y me mantuve atento cuando lo tomó. Ella siempre hacía esto antes de ir al gimnasio, tomaba un poco de jugo para hidratarse y salía a ejercitar su lindo cuerpo.
Mi prima pequeña se bebió el jugo y en apenas 15 minutos vi que se empezó a marear. La levanté y la llevé a mi habitación, la puse en la cama y seguí hablando hasta que se desmayó. Y ella todavía estaba usando este traje ajustado de gimnasia, poniéndome aún más cachondo. Estaba quitándome tranquilamente esa ropa y dejándola completamente desnuda en mi cama.
Una joven delicia toda desnuda y yo estaba muy excitado en este momento. Ni siquiera sabía que hacer bien, comencé a besar esa boca que siempre quise. Y bajé y besé y chupé sus tetas perfectas. Continuando comencé a chuparle el coño y luego me quedé por lo menos 20 minutos dándole suelas calientes.
Mi prima pequeña estaba toda manchada después de que la chupé de pies a cabeza. Le di la vuelta a su culo caliente y comencé a lamer su gran culo caliente. Luego llegó el momento de perder mi virginidad y follarme a mi primito caliente. Y comencé a penetrar su delicioso coño y delirando de lujuria. La estaba follando de buena gana y aún no satisfecho decidí comer su sabroso culo.
Y me fui sin lubricante penetrando el culo de mi primito caliente. Y entonces me estaba tirando a la prima traviesa mientras ella dormía profundamente. Después de venir mucho, la volví a vestir, la recogí y la llevé a su habitación. Después de un rato se despertó toda asustada y su coño aún tenía mi esperma. Nunca volvió a dirigirme una palabra. Sabía lo que había hecho, pero como no podía probarlo, se quedó en silencio.
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