Tuve que hacerle sexo oral a un policía de tránsito cachondo que quería darme una multa muy cara por conducir sin cinturón de seguridad. Era tarde, alrededor de las ocho, regresaba a casa del trabajo y se me acercó un joven guardia de tráfico.
Me pidió mi licencia de conducir, mis documentos y se los di. Y el hijo de puta dijo que me iba a poner una multa por conducir rápido y no usar el cinturón de seguridad. No podía conseguir una multa así porque mi marido pensaría que era muy malo y me quitaría el coche. Así que le dije al guardia que podía hacerle un pequeño favor, le pedí amablemente que subiera al auto y así lo hizo.
No dejaba de decir lo difícil que era mi vida y lo mucho que me podría ayudar. Y que si él me ayudaba yo también lo ayudaría y haría que su noche fuera aún mejor. Empecé a acariciarle la polla mientras le decía todo esto con voz de perra al oído. El guardia comenzó a excitarse y comencé a poner su polla cada vez más dura. Lo saqué y era realmente una polla muy grande, gruesa y muy sabrosa. Estaba masturbándome al cabrón y besándolo en la boca, en ese momento era todo mío.
Y después de acariciar la polla del bastardo y besar su boca, comencé a chuparle la polla grande y gruesa. Estaba cayendo en esa enorme polla, chupando solo la cabeza de su polla, que ya era muy grande y gruesa. Me miró con cara de travieso y dijo que yo era una perra muy traviesa. Que tenía un marido esperándome en casa, pero aun así prefería amamantar a otro hombre cuando pagaba una multa. Le dije lo cara que era esta multa y que hacerle una buena mamada sería un negocio mucho más rentable para los dos.
Y yo le practicaba sexo oral a un policía de tránsito volviéndolo loco de lujuria. Estaba chupando lentamente esa polla grande y sabrosa y realmente me estaba empezando a gustar. Su polla era casi dos de la de mi marido, era tan grande. Y quería más, quería pasar su mano por mi trasero mientras caía sobre su polla. Como llevaba una falda, la levanté y dejé puestas solo mis bragas. Y el muy cabrón puede agarrarme el culo y apretarlo mientras yo caía sin florituras con la boca sobre la enorme polla que tenía.
Necesitaba ser rápido porque tenía que irme a casa porque mi esposo ya me estaba esperando allí. Y yo estaba chupando intensamente y el cabrón apretando mi culo. Dejó mis bragas a un lado y comenzó a apretar mi trasero aún más y a pasar su dedo por mi trasero. Luego se lame los dedos dejándolos bien lamidos y penetrando uno de ellos dentro de mi culo. Casi salté con ese dedo y luego continué mamando porque dijo que tendría que hacer que se corriera muy bien.
Y yo estaba dispuesto a hacerle sexo oral a un guardia de tránsito y él me estaba metiendo los dedos en el culo apretado y sabroso. Y yo estaba chupando cada vez mejor y el cabrón finalmente se corrió. Ese chorro de esperma entró en mi boca y tuve que tragarlo todo. Luego me puse la pollera y me aseé, el cabrón no me dio multa y me dejó ir tranquila. Era mucho mejor haber practicado sexo oral a este hombre que pagar una fuerte suma por conducir sin cinturón de seguridad.
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