Penetré el culo de dos jovencitas por dinero y las hice venirse intensamente y también me vine locamente en esta putada intensa. Mi nombre es Alejandro, tengo 42 años y soy padre de una hermosa hija de 19 años y ella tiene dos amiguitas que siempre me enloquecieron de lujuria porque son unas jovencitas deliciosas llenas de fuego en sus culo y me vuelvo loco solo de recordar lo cachondos que están. He disfrutado innumerables veces escribiendo esta historia sobre cómo tuve sexo con estas dos jóvenes traviesas. Como tengo mucho dinero, estos jóvenes buscadores de oro hicieron cualquier cosa por mí por unos pocos dólares. Como tenía muchas ganas de estas dos safadinhas decidí arriesgarme e invitarlas a un polvazo muy bien pagado.
Un día llegaron a mi casa y mi hija se estaba duchando y aproveché ese momento para acercarme a las jóvenes y ofrecerles mi acuerdo. Dijo que tenía muchas ganas de tener sexo con ellos y que les ofrecería 550 dólares a cada uno a cambio de unos minutos de sexo intenso. Lo dudaron y pensaron que estaba bromeando. Pero yo ya estaba muy cauteloso, tenía todo el dinero en mi billetera. Y le eché 550 en las manos a cada una de las jovencitas y dije que esperaría a que me llamaran para arreglar donde íbamos a tener sexo.
Han pasado unas horas y recibo mensajes de estas jovencitas traviesas. Dijeron que aceptaron el trato pero que querían más dinero. Y de 550 cada uno pedía mil dólares, entonces yo tenía que sacar el resto del dinero y enviarlo como transferencia a la cuenta bancaria de cada uno. Y las nuevas chicas traviesas hicieron los arreglos para que yo las recogiera por la noche y las fuéramos al motel. Y cuando llegué me fui a la cama y vi a estas jóvenes quitándose la ropa e intercambiando besos calientes. Fui a un motel barato para que nadie se diera cuenta de que estoy engañando a mi esposa y con chicas de 19 años.
Y como les pagué un buen dinero a estas chicas, no les follaría el coño. Solo quería meterme en el culo de cada uno de ellos porque soy adicta al sexo anal. Me encanta penetrar un culo, incluso más traviesos como estos dos. Y se desnudaron y se besaron mientras muy juntos chupaban mi pistola que cada vez se hacía más dura, y tuve que tomar un poco de medicina para estar más dispuesta. Y me volvería loco con estas dos zorras cayéndome en mi pistola haciéndome flipar de tanto cachondo.
Penetró el culo de dos jovencitas por dinero y me corrí intensamente en el culo de cada una de ellas. Después de conseguir un sexo oral de calidad estas safadinhas se pusieron peladinhas a cuatro patas en la cama. Empecé a chuparles el culo a cada uno de ellos dejándolos bien lubricados. Y yo estaba penetrando mi polla primero en el culo de la más flaca desollando su culo como corresponde. Luego tomé la más caliente y le estaba dando una verdadera paliza de pene dentro de su culo caliente y prieto. Estas dos jóvenes vieron que no sería tan fácil ganar mil dólares.
Y entré enojada porque había pagado mucho dinero y solo me daría por satisfecho dejar a estas dos zorras con el culo despellejado. Y eso fue lo que pasó, yo estaba penetrando más y más fuerte y las jovencitas pedían parar pero no paré porque lo pagué caro. Y fui penetrando más y más fuerte hasta que me corrí intensamente en el culo de una de ellas y la dejé toda sucia de leche. Penetré el culo de dos jovencitas por dinero y me corrí sobre sus culos. Las dos jovencitas se marcharon con el culo adolorido tras ese intenso y sabroso anal.
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