Descubrí que soy gay y decidí tener mi primer sexo anal

Descubrí que soy gay y decidí tener mi primer sexo anal. Quiero compartir contigo esta historia muy traviesa sobre el día que tuve mi primer anal. Y fue muy lindo porque nunca había dejado que ningún hombre me penetrara el culo, siempre quise hacerlo, pero me tomó un tiempo armarme de valor para probar esa experiencia. Mi nombre es Diego, tengo 20 años y vivo en Guadalajara. He tenido novias pero nunca estuve enamorado de ellas y el sexo siempre fue malo.

Pensé que el problema era con mis parejas, pero luego vi que el problema era conmigo, no me gustan las mujeres. Un día decidí ver unos videos de hombres gay teniendo sexo y me gustó mucho, tuve orgasmos intensos y fue maravilloso. Ese día descubrí que me gustaban los hombres, y también tenía diferentes gustos musicales, no me gustaba el hip hip como mis amigas, sino las divas del pop de América. Me vestía con ropa muy corta, me gustaba maquillarme y sí, era gay.

Pero necesitaba hacer lo que más quería, sexo con otro hombre, pero tenía miedo de que me doliera. Y mis padres no lo aprobarían, pero a los 19 años me fui a vivir a Guadalajara, conseguí un buen trabajo y me las arreglé para salir adelante. Entonces decidí ir por primera vez a un club gay con mis nuevos amigos gays que hice nada más llegar a la ciudad. Y en ese club conocí a Carlo, él trabajaba allí como mesero, era muy fuerte y guapo y comencé a hablar con él.

Descubrí que soy gay y decidí tener mi primer sexo anal

Después de eso empecé a ir a este club por Carlo, y nos fuimos acercando más y más, hasta que un día después del club me invitó a su casa. Fui, cuando llegué me sirvió vodka y comencé a besarlo, en ese momento ya había besado a otros hombres, pero nunca había tenido sexo y Carlo quería follarme y decidí dejarlo. Así que todavía estaba un poco nerviosa, me quitó la ropa y me dio un masaje para relajarme, luego me frotó un aceite de masaje en el cuerpo, principalmente en el trasero.

De repente Carlo puso su dedo en mi trasero y se sintió tan bien, estaba bien lubricado con el aceite de masaje. Me emocioné mucho y dije que podía meter su pene, yo estaba acostado boca abajo y en ese momento Carlo comenzó a meter su pene en mi culo, muy lentamente, al principio me dolía mucho y pensé en rendirme. Pero dijo que era así al principio, pero que mejoraría cada vez más y que estaba diciendo la verdad, simplemente se puso mejor y mejor.

Luego me acosté de lado y Carlo siguió penetrando, esta vez logró meter todo su pene dentro de mi culo. Estaba muy excitada, luego me acosté con las piernas separadas y él siguió penetrando su pene cada vez más dentro de mi culo y así terminé disfrutando. Después de eso fuimos a ducharnos y le hice el primer sexo oral a otro hombre, me levanté y me puso contra la pared, me paré con las manos en la pared y Carlo me estaba penetrando el culo de nuevo y terminé disfrutando. el segundo turno. Después de ese día nunca paré, y hoy me gusta el sexo salvaje gay.