Le hice daño a mi primo gay en el culo

Comenzaré este relato erótico declarando que no soy gay. Pero confieso que tuve un momento muy caliente con mi primo que es gay. Terminé lastimando el culo de mi primo gay y dejándolo con el culo abierto y adolorido. Me provocaba mucho llevando una braga muy pequeña y eso me volvía loca de lujuria. No pude resistir el encanto de este travieso gay y acabé follando sabroso con él. Y te cuento cómo mi primo gay terminó seduciéndome y yo penetrando su culo para herirla toda.

Mi primo siempre ha sido gay, pero siempre me ha respetado. Pero un día fui a su casa como siempre, y mis tíos no estaban, entonces lo llamé para jugar a los videojuegos y estábamos en el salón jugando. Hasta que dijo que necesitaba ir al baño y me dejó sola en el salón. Unos 5 minutos más tarde vuelve con una peluca, unas bragas pequeñas y muy maloliente. Y pude ver el tamaño de su culo, un culo grande y realmente sabroso. Vino sentado en mi regazo y diciendo que se moría de ganas de tomarla por el culo.

No pude resistir más y le agarré el culo apretando y sintiendo como era muy sabroso. Y el cabrón se puso a cuatro patas en el sofá y empezó a mover su enorme culo. Esto me emocionó mucho y no pude quedarme sólo mirando. Empecé a chupar el culo de mi primo, le puse las bragas ladinho y estuve lamiendo ese culo caliente sin florituras. El joven safadinho gay era todo piel de gallina y esperaba el pene en su culo.

Penetrando el culo del primo gay gran culo

Y empecé a penetrar el culo de mi primo travieso y él gemía y decía que le dolía el culo. Y esto me dejaba cada vez más excitado y me penetraba cada vez más fuerte. Le daba palmadas en el culo y le rascaba la espalda. Gimió y me llamó sabroso y pidió más y más. Estaba recibiendo una buena dosis de polla dentro de su apretado culo, que cada vez estaba más abierto. Y terminé corriéndome por primera vez en el culo de este bribón.

Saqué mi polla de su culo y se abrió de par en par y me corrí intensamente. Después de eso esperamos unos 5 minutos y empezó a chuparme la polla y se le puso dura de nuevo. Y no pude soportarlo, le pedí que se sentara en mi polla y el muy cabrón empezó a revolcarse en mi polla. Besé sus pechos y su boca mientras se sentaba con fuerza, dejando mi pene bien desollado. Pero era tan delicioso que le dije que siguiera sentado.

Y seguía diciendo que me dolía el culo pero seguía sin dejar de sentarse. Y yo estaba apretando ese gran culo y eso hizo que se corriera. Sin siquiera tocar su pene, el gay bastardo terminó teniendo un orgasmo anal. Y me volví a correr dentro de su culo y lo ensucié todo y lo dejé muy rojo. Tuvo que pasarse una pomada para poder dormir porque todo el culo estaba cocido y le dolía mucho. Pero no se arrepintió, días después me llamó diciendo que quería volver a tener sexo anal conmigo.