Me follé al hijo gay de mi jefe

Hoy les voy a contar una historia que terminé teniendo con el hijo gay de mi jefe. Donde terminé follándole el culo al joven cabrón y dejándolo enamorado de mí. Mi jefe tiene un hijo de 18 años que es gay. Y siempre viene a nuestro trabajo con ropa ajustada y mostrándonos su gran trasero.

El joven va al gimnasio todos los días y hace mucho ejercicio, y es por eso que terminó teniendo un trasero realmente grande. Su trasero parece de mujer, es realmente enorme. Y tiene fotos de tangas donde muestra lo caliente que está su culo. A mi jefe no le importa, porque acepta a su hijo tal como es. Y yo estaba viendo las fotos del joven en instagram y realmente disfrutando de su delicioso rábano picante.

Y está la parte de que mi jefe es muy rico y si me cojo a su hijo puedo conseguir un poco de dinero. O incluso un ascenso o mejor salario en la empresa. Porque mi jefe quiere que su hijo gay se haga cargo de la empresa. Así que decidí actuar y hacer que este joven que será mi futuro jefe se enamore de mí.

Empecé a seguirlo en instagram y un día lo invité a salir. Aceptó y nos fuimos a un bar a beber. Nos emborrachamos mucho y le pedí que viniera a mi casa para seguir bebiendo. Él aceptó ir y yo decidí aprovechar al máximo esta oportunidad que tendría con el joven gay.

Cuando llegó a casa ya estaba besando a este pequeño bastardo y tirándolo en el sofá. Le quité las medias y las pequeñas bragas que llevaba puestas. Luego comencé a chuparle el culo caliente al bastardo dejándolo mucho más excitado.

Me follé al travieso hijo gay de mi jefe

Esta mariquita se puso a cuatro patas en el sofá y me pidió que le follara su culo caliente. Tengo un buen escupitajo en ese culo y mi polla. Y comencé a penetrar el culo del gay con fuerza excitándolo mucho. El joven gay gritaba de placer y dolor con cada penetración en su caliente culo. Y yo estaba muy duro jodiendo el culo de este joven, sólo 18 años.

Luego me pidió que llenara sus grandes bofetadas en el culo. Empecé a follarle el culo mientras le daba una palmada fuerte en el culo y le tiraba del pelo. Le di una bofetada en la cara y gimió mucho con mi pene entrando muy fuerte dentro de su culo caliente.

Al joven bastardo gay le gustaba el sexo salvaje. Y yo le iba a dar lo que quería, así que empecé a pegarle mucho. Las bofetadas eran cada vez más fuertes, los tirones de pelo también. Y él lo estaba encontrando extraño, pero yo estaba muy emocionado. Hubo un tiempo en que gritaba mucho porque le tiraba del pelo con tanta fuerza que hasta le arrancaba unos mechones.

Pero luego, cuando se quejó, lo abofeteé y le dije que se callara. Quería sexo duro para tener una polla fuerte en su culo caliente. Y me estaba follando brutalmente a este gay travieso dejándolo con el culo en llamas. Solo que al cabrón le terminó gustando como lo follé y ahora está enamorado. Incluso le pidió a su padre que me subiera el sueldo.