Mi hija bebió mucho tequila y aprovechamos para follar. Mi nombre es Humberto, tengo 49 años y vivo en Saltillo, mi esposa se fue hace 5 años y me dejo con nuestra hija, la hermosa Renata. Mi esposa y yo ya no andábamos bien en el matrimonio, y para colmo me estaba engañando con su jefe, y un día llegué a casa del trabajo y ella se había quitado la ropa. Me dejó una carta diciendo que amaba al jefe y se fue con él, dejándome sola con nuestra hija. Estaba muy triste, pero pasó el tiempo y ahora vivimos bien sin ella.
Y mi hermosa hija Renata ha crecido y hoy tiene 21 años, es una mujer hermosa, responsable y recientemente he estado teniendo un problema por esto. Me recuerda mucho a su madre, pero es aún más bonita y eso empezó a avivar mi deseo por ella. Y un día me encontré viendo a mi propia hija cambiarse en su habitación, miré a través de la cerradura de la puerta y la vi desnuda. Esto me emocionó mucho, pero siempre me controlé y nunca intenté nada con mi hija.
Lo que pasa es que en el cumpleaños 21 de mi hija llamó a unas amigas aquí en casa y pusieron música alta y tomaron mucho tequila. Terminó la fiesta y cuando fui a ver lo que habían hecho la casa estaba bastante desordenada y mi hija estaba extremadamente borracha. Iba a acostarse con un novio que estaba con ella pero no la dejé, como estaba muy borracha le dije que se fuera y que volviera otro día. El cabrón se enojó, pero lo asusté y le pedí que se fuera.
Entonces tomé a mi hija en mis brazos y la llevé a su habitación. Cuando la acosté creo que pensó que yo era su novio y me besó en la boca. Le pedí que parara, pero como estaba muy borracha no quiso parar y empezó a besarme de nuevo ya intentar sacarme el pene del pantalón. Así que me alejé, pero luego ella se levantó el vestido, se puso a cuatro patas en la cama y me dijo que le follara el coño. En ese momento, al verla sin bragas ya cuatro patas, no pude resistirme.
Juré que haría esto solo una vez, así que me fui a la cama y comencé a lamer su enorme y hermoso trasero, chupando su coño y excitándola mucho. Luego saqué mi pene y lo puse en su coño. Y en ese momento me estaba tirando a mi propia hija y se sentía tan bien. Sostuve su culo con fuerza y estaba penetrando su coño caliente, ella gemía mucho y decía que mi pene era muy grande y sabroso, eso me excitó aún más.
Mientras yo penetraba su coño ella hacía el amor para tener un orgasmo muy sabroso. Y mi hija gemía muy fuerte y decía que mi pene era muy perfecto, cada vez me excitaba más y penetraba con más fuerza. Ella me pidió que le diera una palmada en el culo y le dejé el culo todo rojo de la fuerte bofetada que le di, así que tuvo un orgasmo muy agradable y al poco tiempo terminé corriéndome también, pero saqué mi pene de su coño a tiempo y Tengo el culo sucio y caliente de ella. Luego se acostó en la cama y yo me fui a mi habitación a dormir. El otro día no recordaba nada, y pensó que su novio había pasado la noche con ella.
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