Tuve buen sexo casero con mi hija de grandes tetas

Mi nombre es Renato, tengo 38 años y terminé teniendo un buen sexo casero con mi hermosa hija que tiene unos pechos grandes muy bonitos y naturales. Ella es una jovencita rubia muy traviesa de preciosos pechos perfectos. Lamentablemente mi esposa murió hace unos años y me dejó con mi hija Juliana, ella tiene 19 años y ha comenzado la universidad. Una niña ejemplar, simplemente estoy orgulloso como padre y hago todo por ella. Y hace unos 5 meses terminé viendo a mi hija masturbándose en el dormitorio. Ella estaba gritando y pensé que estaba en problemas, abrí la puerta y la atrapé desnuda.

Ella estaba usando un pene de goma realmente grande y metiendo todo en su coño y yo estaba muy emocionada y también sorprendida. Mi hija siempre fue tan callada y no pensé que fuera una perra. Pero la cachonda habló más fuerte y yo estaba al instante con mi pene muy duro. Me emocioné mucho al ver a mi hija sin ropa. Tiene unas tetas grandes perfectas y me volvieron loco de lujuria y terminé sin poder controlarme más. Y fui por mi propia hija y terminé golpeándola fuerte porque estaba fuera de control después de verla sin ropa.

Estaba paralizada porque estaba desnuda y avergonzada. Pero yo ya estaba muy excitado y me acerqué a ella para tener un buen sexo. Trató de irse pero ya la sostuve en sus brazos y besé su boca con fuerza y ​​agarré sus grandes pechos. Y rápidamente saqué mi pene y lo puse muy duro. Trató de huir pero yo era más fuerte y su coño ya estaba mojado porque se estaba masturbando. Fue muy fácil para mí penetrar mi polla en su coño. Y entró muy sabroso y sintió mi gran polla entrando hasta el fondo de su coño caliente.

Teniendo sexo con la hija tetona

Y así estaba teniendo delicioso sexo casero con mi propia hija. Una bella rubia de grandes pechos que estaba desnuda. Y cuando hizo las primeras penetraciones en el coño, ya no quiso huir y terminó besándome en la boca y llamándome viejo bastardo caliente. Y yo estaba penetrando aún más fuerte el delicioso coño de mi traviesa hija. Ella en ese momento también estaba cachonda a mil, y se entregó totalmente a mí. Y yo estaba penetrando su coño caliente y chupando sus hermosas tetas grandes y naturales.

Tuve sexo casero caliente e intenso con mi propia hija. Después de tomar a esta traviesa con las piernas abiertas me dejó tirado en la cama y se sentó sobre mi polla. Me excité aún más porque ella estaba frotando sus grandes tetas en mi cara y llamándome papá sucio. Y fui penetrando aún más su delicioso coñito que era muy apretado y rosado. Y ella se estaba emocionando con la polla poniéndose muy sabrosa en su coño. Estábamos teniendo un incesto realmente agradable y no nos arrepentimos.

Y para matarme cachonda esta traviesa se puso a cuatro patas y gemía fuerte mientras mi pene entraba muy sabroso en su coño caliente. La safadinha pidió palmadas en el culo y se las di con mucha fuerza dejándole el culo caliente muy rojo y con las marcas de mi mano. Y después de unos minutos terminé disfrutando mucho porque el cachondo era realmente grande y sabroso. Pero tuve que seguir esforzándome para penetrarla y mantener mi polla dura porque necesitaba hacer que mi hija se corriera. Y ella tuvo un orgasmo delicioso y quedó muy satisfecha.