Tuve sexo con mi jefe de 60 años en su casa. Soy una joven pelirroja con cabello rojo natural y coño rosado y tuve sexo con mi jefe de 60 años en su casa mientras su esposa estaba en el salón arreglándose el cabello. Solo tengo 22 años y he tenido sexo con mi jefe desde el primer día en el trabajo. Pero él me paga muy bien, gano más que su ex empleado que tiene más de 10 años trabajando en la empresa, y yo solo tengo 2 meses trabajando para él. Soy tu secretaria en la empresa y fuera de ella soy tu perra traviesa.
Y ese día me quiso llevar a su casa, ya que su mujer y sus hijos estaban fuera. Y entramos en la gran sala lujosa de su casa e hicimos locuras en el sofá. El viejo bastardo vino chupando mis pechos y rasgando toda mi ropa. Dijo que en el auto me había comprado ropa de diseñador porque yo era el mejor empleado de su empresa. Así que dejé que me arrancara la camisa y me chupara las tetas como un pervertido, porque dijo que iba a tener sexo salvaje conmigo ese día. Y me encanta el sexo muy intenso.
Pero es muy viejo, tiene 60 años y no pensé que pudiera manejarlo. Pero me dijo que había tomado una droga que lo ponía aún más cachondo y le daba más energía. Y realmente me sorprendió, después de rasgarme toda la ropa vino a penetrar mi coño con mucha fuerza e intensidad y me tiraba del pelo y me daba bofetadas en la cara. Nunca lo había visto así y estaba demasiado caliente y decidí que haría anal con ese bastardo.
Y le pedí que me trajera un lubricante, me dijo que su mujer lo tenía en la habitación y lo fue a buscar porque se moría por penetrarme el culo. Y cuando llegó me puse a cuatro patas en el sofá y le pedí que me aplicara aceite por todo el culo y me untó y me empezó a dar por el culo. Con mucho cuidado el viejo bastardo fue penetrando su grueso pene dentro de mi culo que es muy prieto. Le pedí que me diera una palmada fuerte en el culo y comenzara a penetrar con ira como lo estaba haciendo antes. El cabrón me torció el brazo y empezó a penetrarme el culo con fuerza.
Gemí intensamente cuando la polla del bastardo se hizo más y más fuerte dentro de mi culo caliente. Y me tiró del pelo y me apretó el culo mientras su polla entraba muy dura dentro de mi culo caliente. Este sexo anal con mi viejo jefe travieso que no bromeaba en el trabajo fue maravilloso. Y quería que se corriera muy sabroso y comencé a sentarme muy duro en su pene grueso y el bastardo se excitaba cada vez más. Hasta que escuchamos que venía un auto y tuvimos que agarrar nuestra ropa y correr a la habitación de invitados.
Era su esposa, llegó antes de lo habitual y nos tomó por sorpresa. Cerró la puerta de la habitación de invitados y siguió besándome y quería volver a penetrar mi trasero. Luego se volvió aún más emocionante que el sexo, porque su esposa estaba allí en la misma casa y yo estaba en la habitación de invitados dándole mi culo caliente a su marido travieso. Y tuve sexo con mi jefe de 60 años en su casa y nos divertimos mucho. Cuando terminamos tuve que salir a escondidas de su casa sin que su esposa se diera cuenta.
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