Tuve sexo con la joven niñera de mi hijo

Tuve sexo con la joven niñera de mi hijo. Su nombre es Mónica, una bella rubia de unos 25 años. Vive cerca de casa, en la misma cuadra. Ha cuidado a los niños de nuestros vecinos y nos recomendaron a esta hermosa dama que tiene una hermosa sonrisa y un trasero realmente grande. Confieso que no pude resistirme, era demasiado hermosa y terminé engañando a mi amada esposa con esta deliciosa niñera. Ella y su enorme culo que excita a cualquier hombre.

Como he estado casado durante 8 años y recientemente no estaba teniendo mucho sexo, deseaba a esta joven. Ahora, después de que tuvimos a nuestro hijo, mi esposa comenzó a tener sexo conmigo nuevamente. Pero ahora no puedo quitarme de la cabeza a esta Mónica, pienso en ella todo el día y para mejorar las cosas vuelvo antes que mi esposa. Ella sale del trabajo a las seis de la tarde y yo salgo a las cuatro de la tarde. Entonces todos los días tengo 2 horas aquí en casa solo con esta hermosa joven.

Por eso, siempre estamos hablando mucho. Y un día me dijo que su novio ya no tenía sexo como antes. También dijo que había encontrado un muy buen trabajo, gana mucho dinero, pero siempre está sin tiempo y cansado. Un día llegué y le pregunté si quería ganar un dinero extra como niñera. Me preguntó cómo y le dije que con un sexo muy sabroso e intenso conmigo.

Tuve sexo con la joven niñera de mi hijo

Le gustó la idea y terminamos teniendo buen sexo. Ahora les estaré contando detalle por detalle sobre nuestro sexo que sucedió el martes pasado aquí en casa. Como dije, llego antes que mi esposa, al salir del trabajo fui al banco y saqué algo de dinero. Tuve que conseguir 200 dólares para dárselos a esta jovencita, e incluso destrocé el auto a propósito y lo arreglé yo mismo y le dije a la esposa que el dinero se destinó a la reparación del auto.

Le entregué a Mónica los $200 y fuimos a la sala. Como mi hijo dormía en su habitación, fui a la sala con Mónica. Me senté en el sofá con mi pene afuera y ella se quitó la ropa lentamente, luego vino con calma, se arrodilló y me chupó el pene. Tenía una boca mágica porque su mamada era realmente buena. Después de un sexo oral muy sabroso, se corrió encima y estaba sentada deliciosamente.

Estaba muy excitado por esta joven sentada en mi pene. Era mucho mejor que mi esposa, la joven se sentó de buena gana y no se detuvo. Acabé corriéndome en tan solo 15 minutos con esta jovencita sentada. Pero la cachonda fue tanta que ya volví a tomar a la chica y esta vez se puso a cuatro patas. Entonces mi pene se hizo más y más fuerte en su coño caliente y ella también se corrió intensamente. Y seguí penetrando hasta correrme por segunda vez en esta deliciosa jovencita. No siempre hago eso porque ella cobra un precio muy alto por el sexo, pero ya estoy ahorrando más dinero para follarla de nuevo.