Mi nombre es Paloma y tengo 45 años y tuve sexo con mi sobrino. Esto es algo que he mantenido en secreto durante mucho tiempo. Porque no podía revelarlo a nadie y siempre quise desahogarme. Y ahora que conozco este sitio puedo revelar todo a todo el mundo y aún así nadie sabrá quién soy.
Y hoy les voy a hacer disfrutar de la historia real de incesto que tuve con mi sobrino. Solo tiene 24 años, lo que pasó entre nosotros pasó hace como 2 años. Tuve sexo con mi sobrino joven y me dejo con el culo y el coño todo asado. El cabrón vino a pasar las vacaciones aquí en casa porque le gusta mucho su tío, porque son parientes de sangre, y yo estoy casada con su tío.
Siempre me gustó mucho este delicioso joven que creció para ser un chico muy bueno y lo sé porque lo he visto ducharse una y otra vez a través de la cerradura de la puerta. El cabrón tiene un rollo enorme y lo probé todo. De hecho, mi culo y mi coño probaron mucho.
Entonces, un día vino de vacaciones aquí como siempre. Y no me pude resistir, cuando su tío se fue a trabajar decidí atacar. Todavía estaba durmiendo, así que fui a su habitación, abrí la puerta muy suavemente y allí estaba durmiendo desnudo con su enorme pene afuera.
Me mojé mucho al ver ese pene caliente y suavemente fui allí y comencé a acariciarlo. Y no pude simplemente tomarlo, tuve que ponerlo en mi boca y comencé a besar ese pene caliente. Hasta que el joven despertó y se quedó paralizado al verme con mi boca sobre su polla.
Pero luego seguí mamando y él no hizo absolutamente nada, después de mamarlo por casi 5 minutos lo escuché gemir deliciosamente porque estaba amando mi pecho. Así que tuve sexo con mi travieso sobrino que me comió muy bien ese día.
Después de un buen oral me monté en su polla y el bastardo me estaba follando el coño con deseo. Pronto quise tomar una polla por el culo y tuvimos un sexo anal muy sabroso e intenso. El cabron me dejo todo acabado y tambien me vine mucho en este lindo sexo que hice con mi sobrino favorito.
Estos jóvenes de hoy realmente saben cómo satisfacer a una mujer. Me puso caliente y tuvimos un incesto impresionante. Era como una escena de película porno, me convertí en una verdadera perra en ese momento e hice todo con mi travieso sobrino que me puso caliente y agresivamente haciéndome correrme como una perra en celo.
Me encantaba que este cabrón entrara con su enorme pene dentro de mí. Y todavía me llamó puta y me apretó muy fuerte de una manera que mi esposo ya no puede hacer. Y desde entonces me gusta la gente joven y siempre termino engañando a mi marido con jóvenes cabrones que saben tratarme como una puta en la cama.
Se estaba masturbando y la tía quería ayudarlo a usar su coño caliente. Hoy puedes disfrutar de una historia de incesto muy traviesa. Donde terminé teniendo sexo con mi tía, una mujer de 47 años...
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