Soy un empresario que terminó perdiendo la noción y le dije a mi secretaria que le daría casi 1000 pesos a cambio de sexo intenso ahí mismo en ese momento. Y terminó aceptándolo porque tenía una gran necesidad de dinero. A pesar de estar casada aceptó porque 1000 pesos por sexo era dinero muy fácil. Y acabé haciendo anal con la secretaria tetona dentro de mi habitación. Aún tenía al resto de empleados de la empresa, pero estaba tan cachondo que acabamos teniendo sexo en mi oficina en horario laboral.
Fue uno de los mejores momentos de mi vida, al menos el momento en el que más la cagué. Y terminé emocionándome mucho porque siempre quise tener sexo con mi secretaria. Una hermosa mujer de 32 años con cabello largo y unas tetas gigantes que me volvieron loco porque soy adicta a las tetas. El único problema es que ella y yo estábamos casados, y nunca pensé que ella fuera capaz de engañar a su esposo, ya que parecía ser una mujer muy estricta.
Ese día había recibido un resto de la herencia de mi padre y estaba muy emocionado en ese momento. Y en el momento en que recibí la llamada de mi abogado diciéndome sobre este dinero, mi secretaria estaba en la habitación. Y totalmente emocionada le ofrecí 1000 pesos a cambio de un sexo rápido ahí mismo, y para mi sorpresa ni se lo pensó bien y dijo que aceptaba. Entonces terminé teniendo el mejor sexo anal de toda mi vida con esta mujer traviesa de grandes tetas. Y todavía estaba muy emocionado por ella, fueron 1000 pesos muy bien gastados.
Ha cerrado con llave la puerta de mi habitación y ya se ha subido encima de mi escritorio y ha abierto las piernas. Levantándose la falda y mostrándome sus diminutas bragas, las dejó a un lado y me mostró su delicioso coño. Me agarró del pelo tirando hasta que pude poner mi boca en su coño y yo la estaba chupando con voluntad, poniendo mi pene duro al mismo tiempo. Luego me apartó de la silla y vino a sentarse en mi regazo. Sacó mi pene y comenzó a rodar muy caliente encima de él.
En ese momento estaba sintiendo un gran placer porque era mi sueño tener sexo con esta zorra con grandes tetas calientes. Y ella me estaba emocionando mucho con esta intensa zorra hecha sin lujos. Sostenía ese culo y ella frotaba sus grandes tetas en mi cara. Luego se bajó de arriba y se apoyó en la mesa con el culo levantado y me dijo que le penetrara el culo. Y me puse a hacer anal con la secretaria tetona. Y estaba cumpliendo un gran sueño y poniéndose muy feliz y emocionado.
Y con mucho cariño fui penetrando el culo caliente de la traviesa que gemía mucho. Porque mi pene era demasiado grueso y le dolía el culo. Pero por 1000 pesos ella haría cualquier cosa conmigo porque sabía que de donde salían esos habría mucho más si ella tenía sexo muy bueno e intenso. Y fui penetrando ese culo caliente hasta que disfruté mucho. Pagué el dinero a la safadinha y se fue contenta, el otro día vino aún más provocativa con ganas de sexo y tuve que volver a hacer anal con la secretaria tetona.
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