¿Quién no ha querido nunca hacer una buena mamada en el coño de una joven y caliente y traviesa? Siempre he tenido este deseo, pero ser un hombre casado de 56 años lo hace más difícil. Pero terminé cumpliendo este deseo porque le chupé el coño a mi hermosa sobrina que terminó tomando demasiado sedante y se durmió profundamente. Aproveché esta situación y de buena gana chupé su delicioso coño.
Mi hermosa sobrina se llama Maria Luiza, tiene 18 años y vive aquí en mi casa. Porque consiguió un mejor trabajo aquí en mi ciudad. Y sus padres me pidieron que la cuidara bien. Y mi esposa y yo queremos mucho a nuestra sobrina, como no tenemos hijos la tratamos como a nuestra propia hija. Y terminé cuidándola demasiado.
Mi sobrina tiene migrañas, esos dolores de cabeza interminables que su cabeza necesita para explotar. Y cuando tiene estas crisis muy fuertes, acaba tomando una buena dosis de sedante para poder dormir y el dolor de cabeza para aliviar. Y terminé aprovechando esta situación para caer en el coñito prieto y depilado que tiene mi hermosa sobrina.
Y te cuento como acabé chupándole el coño a mi sobrina. Y seguro que disfrutarás mucho, porque solo te escribo y te cuento este secreto porque quiero que tengas un gran orgasmo leyendo mi historia real. Lo que les voy a revelar sucedió hace aproximadamente 2 meses y estoy esperando una segunda oportunidad. Y puede dejarme informarle todo aquí cuando suceda por segunda vez.
Y cuando ella tuvo este último ataque de migraña yo estaba en casa, porque llego a casa mucho antes que mi esposa del trabajo. Estoy a punto de jubilarme, así que donde trabajo tengo algunas ventajas. Y cuando estaba viendo la televisión, mi sobrina llegó temprano a casa del trabajo quejándose de dolores de cabeza. Fue a su habitación y tomó su tranquilizante y yo fui a verla un rato después. Y cuando entré en la habitación ella estaba durmiendo en camisón.
Terminó moviéndose y se le subió el camisón y se le veían las bragas y no me pude resistir. Me quedé allí mirando ese culo muy grande y caliente. Me senté a su lado y froté el trasero de mi sobrina, que ni siquiera se movía. Allí vi que el tranquilizante ya le había hecho un fuerte efecto. Y la tentación habló más fuerte y lo cachondo también, y comencé a pasar mi mano por el culo de mi hermosa sobrina, y fui más allá, dejé sus bragas a un lado.
Y comencé a pasar mi dedo por su culo y bajé a su coño. Oh, ya estaba muy emocionada y le di la vuelta y le quité las braguitas calientes a mi hermosa y joven sobrina. Estaba oliendo esas bragas con ese aroma fresco de coño. Y comencé a deleitarme en dar las primeras mamadas al chochito de mi sobrina hermosa. Estaba prácticamente desmayada por la medicina y tenía que disfrutarlo. Estaba chupando ese coño y poniendo todo mi dedo dentro de ella.
El coño de mi sobrina empezó a mojarse mucho y luego chupé aún más. Y comencé a meterle el dedo en el culo también mientras le chupaba ese delicioso coño. Y así chupé el coño de mi propia y deliciosa joven sobrina. Era un coño bien depilado y pequeño, una verdadera obra de arte. Y tuve la oportunidad de chupar ese coño todo el tiempo que quise. Y después de chupar mucho decidí pasar mi pene en su coño y me fui masturbando hasta correrme y ensuciarla toda con esperma.
Después de correrme en el coño y la barriga de mi sobrina, tuve que ir al baño, buscar papel higiénico y limpiar todo. Luego volví a ponerle las bragas y me fui a la sala a ver la televisión como si nada. Y así le chupé el coño a mi deliciosa sobrina. Ella no sospecha nada y estoy esperando una segunda oportunidad.
Todavía soy una joven virgen, en realidad lo era, porque la semana pasada terminé perdiendo la virginidad y fue con mi propia tía. Ella sigue siendo una corona muy caliente porque tiene un culo...
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