Mi nombre es Luiz, tengo 34 años y te voy a contar como tuve sexo anal con mi suegra dentro del hermoso culo grande y tuvimos un sexo muy sabroso e intenso. Todo ocurrió cuando mi suegra terminó el matrimonio con su marido que la había engañado. Así que quería pasar unos días en nuestra casa hasta que su marido, en este caso mi suegro, dejara la casa y se fuera a otro sitio. Y acepté porque siempre nos hemos llevado muy bien, siempre le he gustado y ella siempre me ha gustado. Así que mi suegra vino a vivir con nosotros durante unos días.
Como trabajo en casa me quedo todo el día sola, porque trabajo a través de internet, desde la pandemia mi jefe nos pidió que nos quedáramos trabajando desde casa, después de ver que se ahorra mucho más al trabajar de esta manera no necesitamos volver a la empresa. Así que me quedé todo el día con mi suegra en casa y empezamos a acercarnos cada vez más. Y un viernes, terminé de trabajar temprano, mi esposa todavía estaba en el trabajo. Decidí abrir una cerveza y beber un poco con mi suegra y acabamos excitándonos y bebiendo demasiado.
Así, no sé qué me pasó, pero empecé a sentirme mal por mi suegra. Creo que estaba demasiado borracho, y mi suegra no es una vieja fea. Tiene 54 años pero sigue estando muy buena, está un poco gordita pero tiene unos buenos pechos y un culo enorme. Y seguí mirando demasiado sus pechos y la traviesa se dio cuenta. Y me sorprendió cuando me preguntó si me gustaban. Me dio mucha vergüenza pero dije que me gustaban. Entonces la traviesa, que también estaba ya un poco borracha, se sacó los pechos y pude ver lo grandes y deliciosos que eran. Y como estaba excitado pregunté si podía chuparlos.
La traviesa me sonrió y dijo que sí, y me fui a chupar las grandes tetas de mi traviesa suegra. Ella gimió y me pidió que la lamiera más y entonces empezó a pasar su mano por mi polla. Dejé el vaso de cerveza en el suelo y me acerqué a ella y empezamos a besarnos en el sofá. Chupé sus sabrosos pechos y saqué mi pene. La traviesa se quitó el resto de la ropa y también pude ver su enorme y caliente culo. Esto me excitó mucho y aún más cuando la traviesa empezó a chuparme la polla. Fue una mamada muy sabrosa y para colmo seguía frotando sus pechos contra mi polla.
Estaba muy excitado y entonces la traviesa empezó a sentarse sobre mi polla. Ella se revolcaba muy a gusto y yo sostenía ese enorme culo y daba palmadas. Me llamó travieso y dijo que siempre quería tener sexo conmigo. Pero como pensaba que yo era fiel a su hija, nunca intentó nada. También me dijo que iba a tener el sexo más delicioso de mi vida y luego se bajó y se fue a su habitación. No entendí lo que estaba pasando y ella volvió rápidamente con una pequeña botella de aceite. Era lubricante y lo frotó en mi polla y luego lo frotó por todo su gran culo caliente.
Empecé a preguntarme qué era y me excité mucho cuando se sentó sobre mi polla, y esta vez no fue con su coño sino con su culo. Y así empezamos a hacer un sexo anal muy sabroso y fui penetrando con facilidad el gran culo perfecto de esta traviesa dejándola muy excitada. Ella gimió mucho y allí frotó los sabrosos pechos en mi cara mientras mi polla entraba con fuerza dentro del caliente y apretado culo travieso.
Entonces ella se pone a cuatro patas y yo le estoy dando palmadas en su gran culo caliente y sigo metiendo mi polla dentro de su culo caliente y después de un tiempo ella disfruta intensamente y me pide que me corra también. Y le ensucié ese enorme culo toda la leche, realmente fue el mejor sexo anal de mi vida, y después de ese día empezamos a follar todos los días hasta que se volvió a ir a su casa.
Me emborraché mucho en la playa y dejé que mi cuñada me chupara el pene. Esta historia es realmente interesante y tendrás un orgasmo intenso si te gusta leer historias reales de traición. Esa fue...
LEA ESTE CUENTOTe diré cómo llegué a ser conocido como el bombón que muestra las tetas. Mi nombre es María Eduarda, tengo 22 años y trabajo en un supermercado aquí en Tijuana. Y hace como 5 meses terminé...
LEA ESTE CUENTOEstaba deseando tener un encuentro íntimo con una masajista. Había oído hablar de los servicios eróticos que ofrecen, pero nunca los había probado. Así que decidí que había llegado el momento...
LEA ESTE CUENTOMe follé a mi cuñada de 18 años que quería sexo anal y como me rogaba que le penetrara el culo tuve que hacerlo. Me llamo Rubens, tengo 35 años y estoy casado, todavía no tengo un hijo pero es...
LEA ESTE CUENTOEste Conto ainda não recebeu comentários