Os voy a contar como tuve sexo con un ginecólogo negro de gran pene que me metió en esta putada intensa y caliente. Mi esposo me llevó al ginecólogo para que me hiciera los exámenes semestrales de rutina que siempre me hago. Y esta vez ha cambiado el médico de la clínica donde suelo ir. En lugar de un ginecólogo gordito y viejo, había un mulato muy sabroso y alto de solo 30 años que ya me dejó con el coño todo mojado. Y mi esposo se puso muy celoso y nos pidió que fuéramos a otra clínica, pero yo dije que tenía que ser esa.
Era mi turno y ya estaba entrando en la habitación negra y caliente y estaba toda mojada por estar a solas con él en una habitación cerrada. El médico me pidió que me quitara la ropa y comencé a quitarme la camisa y le estaba mostrando mis pechos al negro. Y yo no me quitaba la ropa normalmente, me la quitaba de forma sensual como si estuviera haciendo un striptease. Y el hombre negro estaba vidrioso mirando mi cuerpecito caliente. Después de mostrar mis tetas, le mostré mi gran culo redondo. Me senté en la cama con las piernas separadas y vino a examinarme.
Empezó a tocarme el coño y no me pude resistir, ya agarré la cabeza del doctor y la metí con fuerza en mi coño y lo obligué a chuparme el coño. El negro ya no quería hacer eso cuando trató de irse ya salté sobre su regazo y traté de besarlo a la fuerza. Entonces no pudo resistirse y terminó rindiéndose a mi juego de seducción y besándome en la boca. Rápidamente saqué su polla y comencé a chupar ese enorme palo negro que medía casi 25 centímetros. Y yo estaba tragando este delicioso pene y el negro gimiendo de lujuria.
Después de chupar intensamente el enorme pene de este delicioso doctor, comencé a rodar sobre él y frotaba mis pechos en la cara del hombre negro para que no tuviera tiempo de pensar demasiado y ver que lo que estábamos haciendo estaba mal. Porque un médico no puede relacionarse con los pacientes de esta manera. Pero no pude evitarlo, la cachonda habló más fuerte y yo estaba loca de deseo porque no podía soportar ver a ese negro caliente tomando mi coño. Y tuve que dejar que él hiciera todo el trabajo y hacer que me pusiera caliente.
Este hombre negro me tomó en sus brazos, me levantó y me apretó el culo mientras empujaba su pene con la máxima potencia dentro de mi coño. Mi celular empezó a sonar porque mi esposo ya estaba impaciente porque yo estaba tardando más de lo normal. Y estaba siendo penetrado por este negro con el pene gigante que me excitaba mucho. Entonces el cabrón me tiró encima de su mesa y siguió penetrando mi coño intensamente. Pero entonces alguien llama a la puerta, era mi marido impaciente queriendo saber qué estaba pasando. Así que necesito vestirme rápido e irme a la cama.
El médico abre la puerta y entra mi marido loco y avergonzado porque no vio nada malo. Lucho con él y vuelve a la recepción. Tan pronto como regresó, tuve relaciones sexuales con el ginecólogo sucio que siguió penetrando mi coño aún más fuerte. Y quería correrme muy rápido para no arriesgarme a que mi esposo se interpusiera de nuevo en nuestro sexo. Este bastardo se corrió en mi coño y fue uno de los mejores sexos que he tenido. Ahora en lugar de ir allí cada seis meses voy al menos una vez al mes a follar mucho a ese cabrón.
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