Tuve sexo por primera vez con el padre de mi amigo

Tuve sexo por primera vez con el padre de mi amiga y tuve un orgasmo demasiado intenso y os voy a contar cómo ocurrió. Me llamo Joana, soy una joven rubia de 19 años que siempre soñó con ser muy rica. Pero la realidad es muy diferente, porque mis padres no tienen dinero y yo tampoco. Trabajo en un supermercado casi todos los días, y no soportaba más esta vida, quería que todo cambiara pronto y las cosas empezaron a cambiar gracias al señor Otavio, mi vecino que tiene 50 años, es el padre de mi mejor amigo y siempre voy a su casa.

Tienen más dinero que nosotros, el Sr. Otavio trabaja en un banco y gana lo suficiente para dar una vida cómoda a su familia. Siempre me he fijado en su forma de mirarme, siempre pasando su mano por mi hombro, abrazándome. Esto comenzó después de que cumplí 18 años, se volvió muy cariñoso conmigo. Mi padre incluso me pidió que no fuera mucho a su casa, porque un día le oyó hablar con sus amigos de que tenía un vecino muy caliente. Y mi padre sabía que estaba hablando de mí, pero como mi mejor amigo vive allí, seguí adelante.

Un día mi mejor amigo llegó con un flamante teléfono móvil y confieso que me dio envidia. Su padre se acercó y empezó a hablar de lo bonito que era el teléfono. Terminó haciéndome una oferta cuando mi amigo fue al baño. Ella se fue y él se acercó a mí y me dijo que podía darme uno aún mejor que ese, sólo tenía que quererlo. Le dije que no podía aceptar, pero insistió en que me daría uno nuevo. No le creí, pero al día siguiente, cuando salía del trabajo, me estaba esperando en el coche. Me preguntó si aceptaba que me llevaran a casa y le dije que sí.

Me subí al coche y me entregó el móvil del que había hablado, no le creí pero le dije que no podía aceptar. A mis padres no les gustaría, pero entonces me dijo que me inventara una excusa, que dijera que había un sorteo en mi trabajo y que había ganado. No pude resistirme, era un móvil aún más moderno que el que le había regalado a su hija. Así que lo acepté, estuve todo el camino a casa jugueteando con él y viendo lo bueno que era realmente y mil veces mejor que lo que tenía. Cuando llegamos a casa, me puso las manos en las piernas y me dijo que me quería de verdad, y que quería cuidar de mí ya que mis padres no podían permitírselo.

Al día siguiente me esperaba de nuevo en la puerta de mi trabajo. Así que me subí al coche y ya estaba con otro regalo, un bolso y unos zapatos nuevos. Dijo que su hija le ayudó a elegir, que eran para ella y que compró 2 de cada. Por supuesto, regresó después de llevar a su hija y consiguió los mismos para mí. Yo estaba muy contento, así que le di un beso en la mejilla y él se dio la vuelta y dijo que lo quería en los labios. Y no había manera, tenía que besarle en la boca y el muy cabrón ya estaba pasando sus manos por mis piernas. Le dije que era virgen y eso le hizo aún más feliz. Me llevó a una calle más oscura y fuimos al asiento trasero donde me quité toda la ropa.

El bribón empezó a chuparme el coño, me llamaba guapa y me metía el dedo muy despacio. Miré el móvil a mi lado y me emocioné, no era así como quería perder mi virginidad pero es mejor un viejo feo con dinero que un joven sin dinero. Y me estaba chupando y después de eso con mucho cuidado empezó a meter su pene en mi coño. Mis piernas estaban abiertas y él me besaba la boca y me penetraba el coño lentamente. Me pidió que me pusiera a cuatro patas, me agaché y me volvió a penetrar.

Tenía grandes manos y me apretaba el culo poniéndome cachonda. Esa polla entrando lentamente era muy sabrosa. Y en menos de 15 minutos vino y ensuciamos el asiento trasero. Ya no podía tener sexo, así que me puse la ropa y nos fuimos a mi casa. Me fui a casa feliz con mi nuevo móvil y al día siguiente estaba el viejo cabrón en la puerta de mi trabajo. Ese día volvimos a tener sexo y me dio más regalos, y aún hoy a veces tengo sexo con él, como nunca dura más de 20 minutos es muy provechoso para mí y placentero para él.