Tuve sexo salvaje con mi cuñado caliente y me penetró muy duro. Hoy quiero contar aquí en este cuento erótico sobre el día que mi cuñado y yo tuvimos sexo por primera vez. Terminé dejándolo penetrar mi coño y también mi culo, era tan delicioso. Les estaré contando todo sobre ese día aquí, fue el mes pasado en su casa. Mi esposo bebió demasiado y terminó teniendo que acostarse temprano. Me quedé con mi cuñado y me reveló su deseo de tener sexo conmigo. Como es un hombre mucho más guapo que mi esposo, no pude resistirme. Me entregué a él y tuvimos sexo loco en su habitación.
Mi esposo tiene un hermano que se llama Augusto que tiene mucho más dinero. Es mucho más bonito e incluso más sabroso. Mi esposo también es muy guapo, pero su hermano lo es mucho más, y todavía está el tema del dinero. Y no les voy a mentir, el dinero también seduce a la gente, como mi esposo no estudió como su hermano terminó sin hacer muy buen ejercicio. Actualmente trabaja en la empresa de su hermano, yo también trabajo, soy su secretaria. Y por eso terminamos acercándonos, y un día pasó, tuvimos sexo y me entregué por completo a él.
Era un sábado por la noche, estaba haciendo la cena y nos llamó. Él también tiene una esposa, incluso somos amigos. Pero aun siendo amigo de su esposa, no podía dejar de pensar en él. Un día en el trabajo terminamos besándonos, estábamos hablando, era tarde, me pidió algo de comida porque yo estaba ayudando a organizar algunos proyectos para su empresa. Y creo que con la ayuda del vino que abrió, el ambiente terminó de calentarse y nos besamos. Días después hizo esta cena, y bebimos toda la noche. Tenía un tequila muy fuerte, mi esposo se dejó llevar demasiado porque no estaba acostumbrado y se emborrachó bastante.
Terminó acostándose más temprano, Sandra, la esposa de Augusto, también se acostó más temprano porque estaba cansada. Así que en la sala Augusto y yo estábamos bebiendo y hablando, Sandra y mi esposo nunca se imaginarían que yo tendría sexo con Augusto en medio de la sala. Pero sucedió, cuando todos se fueron a dormir se me acercó, y me dio un beso. Terminé entregándome a él y el cabrón ya me estaba abriendo el vestido y tratando de chuparme los pechos. Le pedí que se detuviera y el cabrón me tomó de la mano y me llevó a otro cuarto de huéspedes que tenía en su enorme casa.
Fuimos a la recámara y ahí ya me estaba quitando el vestido y se volvió loco al verme desnuda. Luego sacó su enorme pene y lo empujó dentro de mi boca. Estaba chupando caliente hasta que tiró de mi cabello y dijo que hoy iba a experimentar sexo salvaje. Quien seguramente debe estar cansada de tener sexo ligero con mi débil esposo. Y hoy me encontraría con la mejor de las putas, me tiró del pelo con más fuerza y empujó su pene en mi boca. Luego me tiró sobre la cama y comenzó a abofetearme y su pene estaba penetrando mi coño con fuerza.
Me atragantaba y me penetraba de buena gana y me miraba con su cara de loco. Y en lugar de estar asustado lo estaba disfrutando. Mi marido nunca me había tomado así antes, era realmente salvaje y me estaba penetrando con mucha fuerza. Me excité mucho y dejé que siguiera penetrando más y más fuerte, hasta que me puso a cuatro patas y empezó a darme una paliza en el culo muy fuerte. Él para completar todavía penetró con fuerza su pene en mi culo sin siquiera decirme. Casi grito porque me dolía, no te voy a mentir, pero dejé que me siguiera penetrando. Tuvimos sexo muy caliente y muy salvaje y me encantó.
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