Tuve sexo intenso con la esposa de mi jefe una hermosa mujer madura rubia dueña de grandes pechos que me dejó demasiado excitado. Y no pude resistirme, ni ella que llevaba días sin sexo real. Y como odio a mi jefe no hubo manera, tuve que tener sexo con su mujer y la dejé con el coño y el culo bien pelados y ardiendo porque mi pene es muy grande y me gusta el sexo salvaje. Y a la chica traviesa también le gusta entonces combinada y aún podría vengarme de mi jefe que es un viejo y aburrido y ahora un cornudo domesticado.
Tengo 22 años y un buen trabajo, pero mi jefe es muy aburrido, me trata como un esclavo y no me valora como es debido. No me ha aumentado el sueldo desde hace 3 años y sigue peleando conmigo. Pero un día acabé desquitándome con él, el cornudo me pidió que fuera a su casa a por las gafas que había olvidado. Él tiene coche y yo moto y aun así tuve que ir allí, me puse todo soado porque vivía lejos. Y fue su mujer la que abrió la puerta, todavía estaba en camisón porque eran las 10 de la mañana. Le dije que me daría las gafas y me dijo que pasara.
Y seguí mirando a esta rubia con grandes pechos caminando y no pude resistirme. Quería vengarme de mi jefe y la mejor manera sería tener sexo con su mujer. Así que cuando volvió con sus gafas le dije que me parecía muy guapa y que mi jefe era un hombre afortunado. Y le dijo que tenía que valorar esta suerte o la perdería por otra persona. Le pregunté si era infeliz en su matrimonio y me dijo que sí. Y ahí vi la oportunidad de tener sexo con ella y vengarme del idiota de mi jefe.
Y dije que una mujer tan hermosa como ella se merecía muchos besos y un pene muy grande. Me sonrió y me preguntó si tenía un pene grande. En ese momento la saqué aún suave de mi pantalón y ella vio que era realmente grande, 21 centímetros muy gruesa y se acercó cogiendo mi polla y besando mi boca. Empecé a quitarle el tirante de la blusa y a dejarle los pechos al aire. Entonces empecé a chuparlos, dejándola mojada de placer. Y para excitarme empezó a chuparme la polla.
Y cada vez era más grande porque esta rubia de grandes pechos sabía cómo hacer un sexo oral de calidad. Empezó a chuparme la polla y a llamarme “travieso”. Después me cogió de la mano y me llevó a su dormitorio, donde duerme con su cornudo, y me tiró en la cama. Se dio la vuelta y se quitó la camiseta, quedando completamente desnuda. Entonces se corrió lentamente sentándose en mi polla y dándome una palmada en la cara, me dijo que iba a hacer que se corriera y que debía penetrar su coño con fuerza.
La obedecí y fui agarrando ese culo caliente, chupando sus grandes tetas y penetrando mi pene con todas mis fuerzas dentro de su coño. Pidió bofetadas en la cara y luego se puso a cuatro patas donde empecé a tirarle del pelo y a penetrarla aún más fuerte. En ese momento me llamó mi jefe para saber por qué me estaba retrasando, entonces contesté al teléfono y le dije que mi moto había pinchado la rueda y que mientras tanto yo estaba penetrando el coño de su mujer y acabé disfrutando sabroso y travieso estaba gimiendo y tuve que colgar el teléfono para que mi jefe no sospechara nada.
¿Has tenido sexo con alguna virgen nueva antes? Ya os contaré cómo acabé quitándole la virginidad a la joven Rafaela, una delicia de morena y caliente, de grandes pechos, precioso culo y sólo 19...
LEA ESTE CUENTOTuve sexo con joven gringa en un lago de Tulum. Mi nombre es Gabriel, tengo 26 años y trabajo como guía turístico. Como todos saben Tulum es una ciudad hermosa, en mi opinión es la más bella de...
LEA ESTE CUENTOMi novia y yo tuvimos sexo con su maestra. Mi novia tiene un profesor muy rico, le da clases aquí en la universidad de nuestra ciudad. Somos de la Ciudad de México y este profesor suyo tenía muchas...
LEA ESTE CUENTOTuve sexo con mis 2 traviesos jefes y disfruté demasiado sabroso en esta intensa orgía que hicimos en horas de trabajo. Mi nombre es Roberta, trabajo como secretaria desde hace 4 años en una...
LEA ESTE CUENTOEste Conto ainda não recebeu comentários