Me corrí demasiado rápido follándome a mi hermana y te diré cómo terminó pasando eso. Si te gusta mucho leer historias eróticas reales muy zorras. Este seguramente será el mejor cuento mexicano que jamás hayas leído. Porque disfruté mucho esta loca historia y ustedes disfrutarán y disfrutarán leyendo todo en detalle sobre cómo terminé penetrando a mi hermana. Mi nombre es Leandro, tengo 22 años y sigo viviendo con mis padres aquí en Tulun. Tiene un restaurante y todos lo ayudamos todos los días. Así salgo muy poco y como resultado termino conociendo a pocas mujeres.
Mi hermana se llama Amelia, solo tiene 19 años y es una joven hermosa y muy caliente. Soy adicta a verla desnuda, cada vez que se ducha me gusta verla desnuda. Me masturbo todo el tiempo, desde que cumplió 19 años y se puso muy caliente no pude resistir más. Y hoy me encanta masturbarme viendo a mi hermosa hermana dándose una ducha. También me gusta cuando es de noche y ella está durmiendo, voy a su habitación y la observo dormir lentamente y me masturbo sin problemas. Pero un día terminé teniendo una gran oportunidad. Mi hermosa hermana llegó a casa muy borracha.
Como solo tiene 19 años, mi madre no la deja dormir en casa de su novio. Y siempre que van a una fiesta el cabrón la deja en casa y se va porque mis padres son muy estrictos. Así termino aprovechando esta situación y tuve el mejor orgasmo de mi vida y aquí te cuento todo. Estaba viendo la televisión y la vi entrar muy borracha y se fue directo a su cuarto. Le costaba caminar de lo borracha que estaba. Entonces la vi entrar en la habitación y no cerró la puerta. Esa noche mi hermana estaba usando un vestido muy corto, seguramente ya había tenido suficiente sexo esa noche, porque estaba muy provocativa.
Entré a la habitación y por suerte para mí mi hermana estaba acostada y su vestido, como era corto, se le subió demasiado. Y su gran trasero estaba completamente fuera y para mi deleite esa noche ni siquiera llevaba bragas. Estaba locamente cachonda por poder ver de cerca ese gran culo perfecto, y con cuidado encendí la linterna del celular y comencé a acariciar el enorme trasero de mi hermosa hermana. Ella se movió y preguntó quién era, como estaba muy borracha le dije que Jorge era su novio. Entonces tuve que entrar a ese teatro y me subí a la cama y me puse encima de ella, en ese momento fui más allá y me saqué el pene.
Y luego comencé a poner mi pene dentro de su coño. Ella gemía suavemente diciendo que mi pene había crecido y que era más grueso. Como estaba muy borracha, ni siquiera se dio cuenta de que era yo, su hermano encima de ella y no su novio. Aproveché esta oportunidad y estaba penetrando de buena gana su coño y cada vez que metía mi pene me excitaba aún más con esta zorra entre hermanos. Así que decidí sacar mi pene del coño de mi hermosa hermana y comencé a meter mi pene en su culo caliente.
Con mi pene dentro del culo de mi hermana no aguanté 10 minutos y terminé corriéndome. Le unté el culo con leche fresca y al mismo tiempo me bajé de ella y comencé a ponerme la ropa. Luego me miró y se esforzó por ver y me preguntó por qué me veía tan diferente. En ese momento entré en pánico y terminé saliendo corriendo de su habitación, fui directo a mi habitación y fingí que estaba durmiendo. El otro día mi hermana no me dijo nada de lo que pasó el otro día, pero después la vi hablando con su amiga. Dijo que había tenido un sueño muy real teniendo sexo conmigo.
Vi a mi madre sentada en el pene de su hermanastro y me divertí mucho viéndolo todo. ¿Alguna vez has visto a dos personas teniendo sexo en vivo? Yo ya, no eran exactamente las personas que quería...
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