Lo que te voy a decir te va a poner muy duro el pene y te garantizo que te correrás rápido. Porque es una historia muy loca y muy excitante sobre mí siendo cogida por un extraño. Estaba cansada de que mi marido me la follara mucho y se la di al repartidor de tacos. El bastardo me folló fuerte y muy rápido mientras mi esposo estaba en la ducha.
Esto sucedió hace 2 meses y medio, y fue algo que me emocionó mucho. Tan emocionada que decidí compartir aquí con ustedes todo lo que pasó esa noche. Era un sábado, nuestros hijos estaban de fiesta y decidimos pedir tacos y burritos para la cena. Y estaba más emocionado que de costumbre y terminé haciendo esta locura.
Mi marido de 45 años ya no podía follarme como es debido. Y siempre tenía que masturbarme después para obtener un buen semen. Y en ese momento, no había tenido relaciones sexuales durante casi 12 días. Y no podía soportar más masturbarme todos los días. Quería un pene realmente agradable que me follara duro y me hiciera gemir mucho.
Así que terminé perdiendo la línea y me entregué a la cachonda. Y tuve sexo con un hombre desconocido en mi sala de estar. Se lo di al repartidor bastardo y me folló como una puta y aún así se corrió en mi culo. Tuve que limpiar muy rápido, afortunadamente mi esposo tarda mucho en ducharse. Te garantizo que nunca has visto una locura como esta.
Ese día, como dije, estaba más emocionado que de costumbre. Y cuando llegó la noche mi marido dijo que se iba a duchar. Y me dio el dinero para pagarle al repartidor cuando llegó con nuestra cena. Y mi marido suele tardar mucho en la ducha. Está muy gordo, por lo que necesita más agua para limpiarse.
Y yo estoy en camisón corto, muy excitada y llena de calor en mi coño. Y en ese momento suena el timbre y cuando abro era un repartidor muy simpático. Ruidoso y fuerte, el bastardo entraba y me devoraba con los ojos. Porque estaba demasiado bromeando en camisón. Me miró y dijo que era una morena muy caliente y traviesa.
Lo miré y le dije que podía follarme mientras mi esposo estaba en la ducha. Ni siquiera pensó durante 30 segundos y vino agarrándome y frotando mi trasero. Me besó y metió su dedo dentro de mi coño y mi culo. Lo tiré en el sofá y saqué su gran polla. Y yo estaba sentado caliente mientras me follaba el culo.
Luego me recogió a cuatro patas en el sofá y me folló aún más fuerte. Y yo estaba acariciando mi coño para correrme muy rápido. Porque mi marido se estaba duchando y me estaban follando por el culo. Y luego se corrió sobre mi trasero y se fue muy rápido. Y se lo di al repartidor porque era deber de mi marido follarme caliente. Y como no cumplió con esta tarea, busqué otra.
Mujer casada de 50 años engaña a su marido con un joven de 18 años Me llamo Jessica y soy una mujer madura de 50 años que estaba muy insatisfecha con su marido, que ya tiene 56 años y no...
LEA ESTE CUENTOLo que te voy a contar es uno de los puteos más intensos y calientes que he hecho en toda mi vida. Yo y 2 amigas mas tuvimos sexo con una deliciosa vecina casada que tiene 43 años y es una madurita...
LEA ESTE CUENTO¿Te gustan las historias reales de traición? Dejaré aquí mi experiencia que tuve. La primera vez que engañé a mi marido con una chica de 18 años. Tengo 48 años y siempre he tenido buen sexo...
LEA ESTE CUENTOCorno es feliz viendo a su mujer tener sexo con otro y disfruta saboreando con este intenso puterío hecho en su casa. Mi nombre es Leandro, tengo 24 años y trabajo en una pizzería aquí en Tijuana,...
LEA ESTE CUENTOEste Conto ainda não recebeu comentários