Tuve relaciones sexuales forzadas con mi hermana menor y te contaré cómo sucedió todo. Tengo una hermana menor, de 18 años, llamada Larissa, blanca y hermosa con un cuerpo perfecto. Ella está en el equipo de voleibol del colegio y tiene un cuerpo precioso, y yo soy el entrenador del equipo, soy mayor y me encanta el deporte, y en mi tiempo libre ayudo a entrenar al equipo del colegio donde estudié.
Y veía a mi hermana y ella llevaba unos shorts muy cortos y eso me ponía muy cachondo. Intenté alejar esos sucios pensamientos pero no pude, eran más fuertes que yo. Y un día, después de un entrenamiento intenso, todas las chicas se fueron y quedamos solas mi hermana y yo, y le dije que se fuera a duchar al vestuario que yo la estaría esperando.
Y no pude resistirme, esos pensamientos sucios volvieron a aparecer y acabé entrando en el vestuario. Entré lentamente y me acerqué, y vi a mi hermana desnuda duchándose, y se me puso dura enseguida. No podía quedarme mirando y decidí quitarme la ropa y acercarme a mi propia hermana.
Y acabé sorprendido porque no se asustó, todo lo contrario, se alegró de verme desnudo a su lado. Se acercó a mí y empezamos a besarnos muy bien. Ella acariciaba mi pene y yo apretaba su gran culo perfecto. Y nos besamos hasta dejarme aún más sorprendido, se arrodilló y comenzó a chupar y besar mi polla, volviéndome loco de placer.
Le tiraba del pelo y le decía que era muy traviesa. Y la zorra flaca con el culo grande entonces se levantó, sacó su enorme culo, se puso con las manos en la pared y me pidió mi polla en su coño. Y fui muy despacio metiendo mi pene dentro de su caliente y apretado coño. Ella gemía mucho y me llamaba travieso mientras la polla entraba fuerte en su coño.
Tuvimos un sexo muy sabroso en la ducha y cuando llegó la hora de cambiarse de ropa acabé recogiéndola de nuevo. Había un taburete y ella estaba a cuatro patas con su gran culo pegado y yo penetrando de nuevo mi polla en su coño. Y aún así le di una fuerte bofetada en el culo y la hice correrse. En poco tiempo también acabé disfrutando en su coño.
Mi madre estaba necesitada y tuve que penetrar su coño caliente mientras mi padre estaba de viaje. Me llamo Ronaldo, tengo 26 años y sigo viviendo con mis padres, tienen una tienda de ropa y les...
LEA ESTE CUENTO¿Quién no ha querido nunca hacer una buena mamada en el coño de una joven y caliente y traviesa? Siempre he tenido este deseo, pero ser un hombre casado de 56 años lo hace más difícil. Pero...
LEA ESTE CUENTOLe follé el culo a mi hermana en el sofá del salón. Tuvimos sexo rápido y sabroso y me corrí intensamente como ella también. Todo pasó muy rápido porque nuestros padres estaban en casa, en su...
LEA ESTE CUENTOMi nombre es Renato, tengo 38 años y terminé teniendo un buen sexo casero con mi hermosa hija que tiene unos pechos grandes muy bonitos y naturales. Ella es una jovencita rubia muy traviesa de...
LEA ESTE CUENTOEste Conto ainda não recebeu comentários